El Real Madrid se quedó a solo una canasta de conquistar su undécima Copa de Europa de baloncesto. Tras dominar, pero no por mucho, este último encuentro de la Euroliga, el Anadolu Efes se hizo con la victoria por solo un punto. Un Micic que fue letal y un final de Pleiss que les hizo crecer, especialmente en el último cuarto, se llevaron la victoria por 57-58.
No fue un partido de puntuación alta y eso se vio desde los primeros minutos. De hecho, a ambos equipos les costó calentar y meterse en el encuentro. Pero después de un tímido arranque, en cuanto a Tavares se le calentó la muñeca y se plantó en la cancha, el Madrid tomó las riendas del partido.
El caboverdiano estuvo de dulce, tanto bajo el aro en los rebotes (clave especialmente para sujetar a Micic), pero el Efes no se amedrentó. Los de Pablo Laso llegaron a ir por delante doblando en el marcador a los turcos, pero al final del primer cuarto solo había un punto de diferencia. Sería la tónica general del partido.
El buen encuentro de Tavares le obligó a ir con algo de cautela, ya que Ataman ordenó a los suyos ir a por él para intentar desquiciarle.
El equipo español tuvo el título en su mano en una gran inicio de segunda parte. No mató al campeón el Madrid, y el Efes logró el mando para los últimos instantes. Micic, Larkin y Pleiss fueron los mejores.
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