Romero, además, ha explicado este miércoles en rueda de prensa que estas instalaciones han pasado a contar recientemente con un total de 177 puestos, lo que supone "un incremento considerable si se tiene en cuenta que inicialmente, cuando se inauguró hace casi siete años, la sala de estudio en estas dependencias contaba con capacidad para 70 personas".

A este respecto, Romero ha recordado que "fue en mazo de 2007 cuando se abrían por primera vez las puertas de la biblioteca Lope de Vega". Tres años más tarde, en junio de 2010, se adaptó una parte de esta como sala de estudios aislada a los ruidos del uso de la misma, por lo que se denomina como una sala de silencio.

Cuatro años después, en noviembre de 2014, se abrieron dos nuevas salas en estas mismas instalaciones, pasando a contar con 60 plazas más de estudio, alcanzando los 130 puestos para los estudiantes, con un horario para su uso de lunes a viernes, de 09.00 a 20.00 horas, excepto en periodo de exámenes que abría hasta las 00.00 horas.

Pero el "gran cambio" llegó en octubre de 2015 cuando "se decidió que el espacio estuviera a disposición de sus usuarios durante todo el año, excepto diez días puntuales, que coinciden con festividades", ha añadido Romero.

De este modo, según ha explicado el edil, se ha pasado de tener abierta esta sala de silencio 126 días al año a 355 días en horario ininterrumpido de 09.00 a 22.00 horas de lunes a viernes y de 09.00 a 21.00 horas los sábados y domingos, y de forma excepcional, en periodo de exámenes, hasta las 0.00 horas entre semana -de lunes a viernes-.

Con el inicio de 2017 se han habilitado dos salas más dedicadas al estudio, alcanzando las casi 180 plazas, distribuidas en un total de cinco salas.

A este respecto, Rodrigo Romero, ha indicado que "es importante también tener en cuenta el número de usuarios que han registrado estas salas de la biblioteca Lope de Vega en los últimos años, ya que se ha pasado de 3.136 usos en 2010 a 36.521 en 2016, siempre teniendo en cuenta que se han ido ampliando las plazas".