Los detalles del proyecto, elaborado por el arquitecto Fernando Arocha, han sido presentados este jueves en rueda de prensa por el alcalde, José Manuel Bermúdez, acompañado de otros miembros de la corporación, como la concejal de Patrimonio Histórico, Yolanda Moliné.

La restauración afectará principalmente, en esta primera fase, a la 'planta cero' del inmueble, con el objetivo de crear un punto de información turística y otra de difusión de historia de la ciudad, más una pequeña tienda para la venta de productos de artesanía.

La actuación comprende, por ejemplo, la sustitución de la puerta de entrada por otra de bronce, más próxima a la original, la inclusión de piedra chasnera en lugar de mármol en el zaguán de entrada, la construcción de unos peldaños retráctiles para mejorar la accesibilidad y la sustitución de la carpintería.

Asimismo, y en paralelo, se abordará la impermeabilización de la cubierta y la solución a los problemas de canalizaciones y desagüe.

ALBERGARÁ EL 'CAÑÓN TIGRE'

Bermúdez ha agradecido al Gobierno de Canarias la cesión del inmueble y anunciado que será sede del futuro museo de historia de la ciudad y al albergará al 'cañón tigre', cuyo cañonazo hirió al almirante Nelson en su intento de asalto a la ciudad a finales del siglo XVIII.

El alcalde cree que se trata de un proyecto "bien pensado" para sacar el máximo aprovechamiento al edificio, que será "visita obligada" para los turistas.

Una vez se realice esta primera fase -las obras se licitarán en otoño-, el Ayuntamiento va a ir trabajando en la redacción de los proyectos de la fase museística, adaptando el inmueble a los fondos y decidiendo qué es lo que se merece ser expuesto.

El alcalde espera la colaboración del resto de administraciones en la parte museística, y ha avanzado que su filosofía es diseñar un museo "moderno e interactivo", que no sea solo un lugar de exposición.

Bermúdez ha defendido el "compromiso" del Ayuntamiento con la defensa del patrimonio público -otra cosa es el privado, en referencia a los casos de Miraflores-, que se reconoce en este proyecto pero también en muchos otros como la plaza Ireneo González, el templo másonico, la Casa Siliuto, la Casa Mascareño y diversas iglesias históricas de la ciudad.

"Tenemos en marcha el programa de restauración patrimonial más importante de la historia", ha comentado.

UN TESORO DE SANTA CRUZ

El Palacio de Carta, unicado en la Plaza de la Candelaria, fue construido por el francés Francisco de la Pierre en 1752 por orden del capitán de Infantería y primer alcalde electo del puerto de Santa Cruz, Matías Bernardo Rodríguez Carta.

Este palacio servía de residencia para su familia, que ejercía un gran actividad comercial en la ciudad y también a modo de mecenas.

La construcción se prolongó durante 30 años y el inmueble pivota sobre un gran patio central e incluye tres plantas y un sótano.

En sus más de tres siglos de historia ha sido sede de la Capitanía General de Canarias y del Gobierno Civil, y fue recuperado por el Gobierno de Canarias en 2007 tras pagar 5,8 millones al Banco Español de Crédito.