Julio Granado ha sido personaje mediático en varias ocasiones, pero ahora está de nuevo en los medios por un anuncio de empleo que publicó para su discoteca de Benidorm y en el que pedía camareras sin "novios enfermos celosos esperándolas a las cinco en la puerta para llevarlas a casa".

El anuncio también dejaba claro que las aspirantes deben ser mayores de edad, "guapas, con buen físico, mucha experiencia poniendo copas y simpáticas con la gente", aclara después que también deben ser "solteras". El texto insiste en que no quieren que éstas tengan "rollos ni novios enfermos celosos" y mucho menos "en la barra controlándola" ya que en el caso de ser así el encargado del local, Julio Granado, apodado El Feroz', avisa de que la chica en cuestión "no trabajaría más y buscaríamos otra nueva"

El salto a la fama de Granado se produjo por su participación en el concurso Gran Hermano, en su edición número 12. Ya entonces se definía como un chico de barrio, amante del boxeo y de la "gloria del triunfo en un ring". Se quejaba en su vídeo de presentación de su fama de "prepotente y agresivo" y sin embargo aseguraba ser "tierno y con sentimientos". En el pecho lleva tatuada la frase "antes me trago mi sangre que mi orgullo".

El concursante, al que se conoció durante la edición como Julio 'El Feroz', fue expulsado disciplinariamente junto a su compañera Flor por haber pactado montajes para ganar popularidad en el concurso para conseguir contratos en discotecas más tarde.

Las intenciones de ambos concursantes, que mantuvieron sexo en la casa, contravenían el manual de los concursantes de Gran Hermano, que dice que "GH es un concurso de convivencia, por lo que hay que sacar lo que llevas dentro, no finjas, no trates de ser otra persona". Mercedes Milá les comunicó la decisión en directo asegurando que "a Gran Hermano se entra a jugar, no se entra a engañar" y asegurando que era "una gran decepción".

Tras su salida del concurso también saltó a los medios cuando en 2011 fue detenido por supuestamente agredir a un cliente de la discoteca en la que trabajaba de portero, que acabó con una costilla rota e incrustada en el pulmón. Un año más tarde fue acusado de colaborar con una presunta red que cometía estafas gracias a tarjetas de crédito robadas o clonadas. Tras acudir a juicio, Julio Granado fue absuelto por falta de pruebas.

Granado también protagonizó titulares recientemente, al unirse el año pasado al Movimiento Antitaurino de Lucha, una iniciativa de personas ligadas al mundo del boxeo y la lucha que promulgaban "joderle la fiesta" a los aficionados al Toro de la Vega de Tordesillas.

Tras levantarse la polémica por el anuncio en el que pedía camareras para su local, Granado pidió disculpas si "alguna mujer se había sentido ofendida", aunque negó que su anuncio resultara denigrante, explicando que en ocasiones le ha ocurrido que novios celosos protagonizaran peleas en su local y que necesitaba camareras altas o con tacones por la altura de las barras del local.