El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) y exdirector general del Agua de la Consejería de Agricultura, Miguel Ángel Ródenas, ha defendido esta mañana ante la comisión que investiga la construcción y puesta en marcha de la desaladora de Escombreras, la "legalidad" del Ente Público del Agua (EPA).

Si bien dice no recordar "por el ajetreo de los últimos cuatro años" algunas cuestiones por las que se han interesado los parlamentarios. La primera, en concreto es si el crédito de 114 millones de euros que se solicitó a Banesto para que el EPA avalara a la empresa de ACS, encargada de la desaladora, pasó por el consejo de administración de este órgano.

Esta respuesta ha suscitado críticas de diputados de la oposición, como PSOE y Podemos, que advierten que el de la desaladora es "un proyecto de andar por casa" y se muestran sorprendidos de que las decisiones que tomaba el entonces gerente del Ente Público, Amalio Garrido, se hicieran sin consultar al consejo de Administración.

Durante su intervención, Ródenas también ha querido desvincularse de su relación con la desaladora de Escombreras. Para ello ha afirmado que su trabajo "específico" en la dirección general del agua se limitaba a "desarrollar el plan de saneamiento y depuración del río Segura".

"Tenía una participación muy concreta y puntual", ha dicho antes de concretar que se dedicaba a las 45 depuradoras que integran dicho plan. Asimismo, ha asegurado que la desaladora de Escombreras "no es ningún perjuicio al interés general" y ha explicado a los diputados regionales por qué se eligió un modelo de gestión que pasaba por externalizar el proceso.

En su opinión, el proceso era más rápido de esta manera y se garantizaba que en tres años la desaladora ya pudiera aportar agua. "Estamos viendo a otras desalinizadoras que han tardado diez años en implantarlo", ha puntualizado.

Sobre la creación de la empresa pública Hidronostrum el mismo día que compró el 51 por ciento del capital de Desaladora de Escombreras y la posterior compra del 49 por ciento restante, Ródenas ha eludido contestar, aunque ha aclarado que todas las decisiones que se adoptaron "tenían informes de viabilidad de los despachos privados".

Por otro lado, los socialistas han señalado que la desaladora no tuvo la concesión de la Confederación Hidrográfica hasta el año 2009 y suponen que en 2006, cuando se crea el EPA y se compra la participación en la sociedad Desaladora de Escombreras, no podían tener esa concesión.

Ródenas les ha respondido que "emplazar una planta es muy difícil", pues crea "muchos problemas y la situación es compleja", si bien ha defendido la situación de la desaladora de Escombreras, que considera "está en una situación privilegiada".

El exdirector general de Agua ha pedido apoyo a esta infraestructura porque "es una gran obra, sobre todo en un momento de sequía". Advierte que si la situación en el Tajo no mejora "sería imprescindible esta planta para garantizar el abastecimiento".

Para Ródenas, el emplazamiento de la planta es perfecto porque una desaladora necesita ser alimentada por líneas eléctricas de alta tensión "que han creado graves problemas en la planta de Torrevieja, mientras que en Escombreras hay tres empresas que generan electricidad mediante gas natural".

Para apoyar su alocución, ha hecho referencia a una lista de las diez desaladoras que han fracasado por problemas técnicos y ha añadido que "tenemos un buen material en esta planta".

Por otro lado, se ha mostrado orgulloso de la puesta en marcha de la entidad de saneamiento Esamur, a la que se ha adscrito la desaladora, pero ha eludido dar detalles sobre las actuaciones relacionadas con la planta.

Ha añadido que la desaladora de Escombreras "está incluida en el Plan de Cuenca del Segura; la Confederación no pudo contemplarla hasta que la planta contó con la concesión de la Comunidad".

La oposición,

Sorprendida con la gestión del epa

Tras la comparecencia de Miguel Ángel Ródenas, diputados de los cuatro grupos parlamentarios han valorado su comparecencia.

Los diputados de Podemos y del PSOE, Antonio Urbina y Jesús Navarro, se han mostrado sorprendidos de la gestión que hizo el EPA de la desaladora.

"El gerente firmó un aval sin consultar al consejo de administración", ha advertido el diputado de la formación morada. Asimismo, Urbina señala que con esta comparecencia se "ratifica la vinculación entre la desaladora y los contratos urbanísticos".

Por su parte, el socialista Jesús Navarro ha recordado que Ródenas ha confirmado que cuando se inició el proyecto "no se tenía la concesión de la Confederación Hidrográfica" y que se modificó la ley del EPA en la Asamblea Regional "para dar competencias a la gerencia del EPA y queda al descubierto que al consejo de administración se le avisaba poco de las decisiones".

Navarro apunta a que tanto Ródenas como Bascuñana "han venido a la Asamblea a escurrir el bulto".

El portavoz de Ciudadanos (C's), Miguel Sánchez, considera que Ródenas ha sido "ambiguo" en su intervención y se ha marchado sin explicar que pasó entre los años 2005 y 2009 cuando se otorgaron concesiones "sorteando el preceptivo informe de la CHS".

No obstante, afirma estar "satisfecho" de cómo se están desarrollando las comparecencias porque "ya se van sacando conclusiones".

Por último, el popular Juan Luis Pedreño ha apuntado que Ródenas ha explicado que se eligió ese modelo de gestión para la desaladora "porque garantizaba agilidad y suministrar agua en tres años" y ha alabado que se reivindique la importancia de la desaladora que "es una de las mejor preparadas".