Representantes del Gobierno vasco, de la Universidad de Deusto y familiares del juez José María Lidón han participado este lunes en la concentración convocada por la Coordinadora Gesto por la Paz en el centro universitario para homenajear al magistrado cuando se cumplen 10 años de su asesinato a manos de ETA.

El acto conmemorativo se ha celebrado en el Laberinto de la Universidad de Deusto y en él han participado los hijos del juez de la Audiencia Provincial de Bizkaia, Jordi e Iñigo Lidón, la consejera de Justicia, Idoia Mendia y el Rector de la Universidad, Jaime Oraá, entre otros muchos amigos y miembros de la comunidad universitaria.

Además, la Universidad de Deusto, donde el juez asesinado ejercía de profesor, ha publicado un nuevo número de los Cuadernos penales 'José María Lidón' que, en esta ocasión, se dedican a la Reforma penal: Personas jurídicas y tráfico de drogas; Justicia restaurativa.

La publicación, que supone el número 8 de esta colección, recoge las ponencias presentadas en las VIII Jornadas en homenaje a Lidón que se celebraron los días 31 de marzo y 1 de abril en Bilbao.

En este encuentro, se abordaron dos aspectos de la reciente y enésima reforma del código penal. En concreto, lo relativo a aspectos prácticos de la responsabilidad penal de las personas jurídicas y los delitos de tráfico de drogas y, por otro, el enfoque de la atención hacia una realidad emergente en España, y en camino de consolidación en el País Vasco, como es la justicia restaurativa.

En torno a estos temas, la publicación cuenta con las colaboraciones, a partir de la presentación realizada por María Angeles Montes, anterior Fiscal de Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), y Xabier Etxebarria, profesor de Derecho Penal de Deusto, de los siguientes expertos: Silvina Bacigalupo, Angel Juanes Peces, Alejandro Luzón, Ramón Sáez, Concepción Sáez, Esther Pascual, Félix Pantoja, Joaquín Giménez y Juan Muñoz.

Con los Cuadernos penales José María Lidón, la Universidad tiene el doble objetivo de "mantener viva" la memoria del profesor y magistrado asesinado por ETA, "ya que relegarlo al olvido sería tanto como permitir que la insoportable injusticia de su muerte viniera a menos y, en cierta forma, hacerse cómplice de ella".

Asimismo, quiere que "su memoria sea un punto de encuentro" para quienes, "desde cualquier profesión relacionada con el Derecho Penal, compartan el anhelo por un Derecho que contribuya a crear cada vez más amplios espacios de libertad e igualdad y a que éstas sean reales y efectivas para todos".