La intervención, diseñada por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) y autorizada en su momento por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, que ahora ha validado los trabajos acometidos, ha evitado una "falsa reconstrucción" del paño expoliado mediante la colocación de piezas a imitación de las robadas, según señala la Consejería de Cultura en un comunicado.

A tal efecto, recordemos que un estudio realizado por la Asociación de Amigos de la Cerámica Niculoso Pisano acerca del conocido expolio de 2016 reflejaba que el citado robo se saldó con la sustracción de 392 piezas de azulejo, cenefas y rodapiés con un peso aproximado de 240 kilogramos si se tiene en cuenta el mortero adosado a los materiales. En concreto, y siempre según dicho estudio recogido por Europa Press, desaparecieron 300 azulejos, 65 cenefas y 27 piezas de rodapiés, mediante una actuación "perpetrado por profesionales".

En cualquier caso, la actuación acometida por el IAPH ha tenido en cuenta el criterio de la intervención ya realizada en el Claustro de los Muertos en los años 90 del pasado siglo, cuando fue restaurado el sector del monasterio actualmente visitable, que estuvo fundamentada en la recuperación de la geometría básica perdida mediante trazos incisos en el mortero que ayudaban a delimitar cada área decorativa.

Para el caso de la reintegración volumétrica del paño expoliado, se ha contado con morteros tradicionales de cal y arena para recuperar la geometría de los elementos desaparecidos, como paneles, cenefas y cuadrículas de azulejos.

El propio delegado territorial de las Consejerías de Cultura y de Turismo y Deporte en Sevilla, José Manuel Girela, ha visitado este viernes el monasterio para comprobar la restauración, exponiendo que la Junta ha licitado además un contrato para que una empresa realice actividades de promoción cultural relacionadas con este monumento, además de llevar a cabo acciones colaborativas con el Ayuntamiento de Santiponce, que potencien y conviertan al monasterio en foco de irradiación cultural para toda la provincia de Sevilla.

Y es que el mencionado expolio de 2016 supuso un punto de inflexión en el devenir de este monumento, toda una joya del patrimonio histórico, y no pocas voces vienen demandando que el mismo cuente con más promoción cultural y turística.