Una víctima del Estado Islámico llega a España

Sus piernas no han podido aguantar el mes y medio de torturas continuas. Su sistema vascular está gravemente dañado. Estuvo semanas colgado boca abajo. Así empezaba la dura historia de Karlus. Se negó a enrolarse en el Estado Islámico y llegaron las represalias y las torturas. Hoy, Karlus aterriza en España para ser tratado de sus lesiones.