El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, ha criticado hoy la "pasividad" ejercida por el Gobierno de Canarias en el caso de la activista saharaui Aminetu Haidar, que pasó 32 días en huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote, y consideró que el Ejecutivo autonómico es "connivente" con Marruecos con el objetivo de poder conservar "cuatro negocietes".

Así lo manifestó hoy el líder del partido en declaraciones a Europa Press concedidas en Las Palmas de Gran Canaria en las que denunció que el Gobierno de las islas "no condenó al Gobierno de Marruecos por esa deportación absolutamente injusta y premeditada".

"No hay ninguna declaración que yo haya podido identificar de condena al comportamiento del Gobierno marroquí, en el fondo son conniventes con ese Gobierno. Ya hemos visto que el Gobierno conservador de ATI-PP tiene una estrategia de acercamiento por cuatro negocietes a los intereses del Gobierno marroquí que no respeta las leyes, vulnera los derechos humanos y que además es un mal vecino", apuntó Rodríguez.

Para el político nacionalista, los representantes del Ejecutivo canario han mostrado una "absoluta pasividad" en el asunto y "sencillamente miraron para Zapatero como echándole todas las culpas" de la expulsión de Haidar, acaecida el pasado 14 de noviembre.

"Marruecos es el vecino que tenemos y reírle las gracias no conviene, lo hemos visto que se envalentona ante la falta de firmeza y el Gobierno de Canarias ha estado en una actitud impresentable en esta materia", dijo.

Preguntado sobre las peticiones de dimisión de la delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias, por su gestión en el caso Haidar, Rodríguez aseguró desconocer "los intríngulis del proceso administrativo y el papel de la delegada".

"Yo lo que mucho me temo es lo que se haya podido decidir ahí indebidamente, se haya decidido en las alturas. No me gustaría dar facilidades a los que buscan cabezas de turco, yo creo que la responsabilidad política si la hay la hay en el Gobierno de España, en el señor Moratinos que es quien ha gestionado la crisis y que ha reconocido que 24 horas antes le habían comunicado la deportación", apostilló.

Por ello, insistió en que "no sería muy inteligente buscar cabezas de turco a nivel local" ya que no creyó que "esas decisiones se tomen aquí, se toman en Madrid y se han tomado mal".