Las antenas de telecomunicaciones ubicadas en el castillo de Santa Bárbara de Alicante, en el monte Benacantil, causan filtraciones de agua y, por ello, se ha tenido que cerrar una de las salas de este conjunto catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC).

El portavoz del equipo de gobierno y concejal de Cultura, Pedro Romero, ha informado de que estas antenas siguen provocando "un efecto negativo" en el conjunto histórico artístico tanto desde el punto de vista visual como, sobre todo, por las tensiones y vibraciones que causan en la estructura.

Romero ha recordado que la pretensión del Ayuntamiento era el traslado de las antenas a un nuevo recinto en el monte Tossal, aunque la reciente sentencia firme del juzgado de lo contencioso administrativo número 3 que anula el contrato y gestión de esa iniciativa, hace que ahora técnicos de Urbanismo estudien un nuevo emplazamiento, entre los que se barajaría la Serra Grossa.

Romero ha dicho que, a pesar de la sentencia, en el equipo de gobierno "hay conciencia de solucionar" este problema para evitar un mayor deterioro del castillo de Santa Bárbara, que actualmente es "gravísimo".

Además, ha desvelado que actualmente se realizan tareas de rehabilitación para que la estancia que ha sido clausurada por las filtraciones, la "sala larga" (que antiguamente era el acceso al castillo), pueda ser reabierta en septiembre con motivo de una exposición.

En todo caso, el concejal ha insistido en que el PP "no renuncia a trasladar la torre de telecomunicaciones para liberar al castillo de Santa Bárbara".

La Junta de Gobierno Local de Alicante había aprobado el 5 de mayo y el 14 de julio de 2004 el traslado de las antenas al nuevo emplazamiento en el monte Tossal, donde se crearía un centro integrado de telecomunicaciones, aunque un recurso de reposición e impugnación de los acuerdos presentado por Retevisión ha sido atendido por los tribunales.