La relación entre las sustancias psicoactivas y el arte es el tema central de una gran exposición colectiva en París. Sous influences (Bajo la influencia) reunirá obras de casi un centenar de creadores que han trabajado bajo los efectos de drogas, una relación presente, según dicen los organizadores, "desde los albores de la humanidad", o han reflexionado sobre ellas en sus trabajos.

La muestra, que programa el museo La maison rouge de la capital francesa, quiere demostrar la influencia de los psicoestimulantes, sean legales o prohibidos, en tanto que "compañeros" del arte y los artistas, a los que han aportado grados de "asombro, intoxicación, dependencia, accesos místicos o iluminación". La exposición estará en cartel del 15 de febrero al 19 de mayo.

Sin poner límite al tipo de sustancia y "más allá de cualquier juicio moral o posición social", Sous influences reunirá obras de artistas de todo el siglo XX que hayan usado las drogas como "disparadores" o "referencias" para la "creación de paisajes, la estimulación o el recorrido sin fin por carreteras imaginarias. La muestra quiere ser un repaso exhaustivo sobre "las conexiones entre el proceso creativo y el uso de productos psicoactivos".

"Sustancias psicotrópicas viejas y nuevas han sido utilizadas pòr algunos artistas para desencadenar la creatividad o iniciar viajes de locura. Lo que queremos ofrecer es la traducción de este uso al campo de la estética", señala el comisario de la muestra, Antoine Perpère.

La colectiva está planteada en tres partes. La primera está dedicada a la forma en que algunos creadores representan visualmente las drogas o las consecuencias de su uso. Un segundo bloque serán las obras, sobre todo multimedia, que pretenden crear en el espectador efectos sensoriales similares a los que provocan las drogas.

El tercero, el más amplio, exhibe trabajos realizados en combinación con la ingesta o consumo de sustancias psicoactivas, que los artistas emplean como "modificadores para la experimentación o la investigación creativa".

Además de trabajos de escritores y artistas visuales de la primera mitad del siglo XX, desde Baudelaire a Michaux, el grueso de la muestra es de nombres contemporáneos, entre ellos Basquiat, Luc Delahaye, Nan Goldin, Damien Hirst, Carsten Höller, Takashi Murakami, Nam June Paik, Sigmar Polke y Stanislaw Ignacy Witkiewic. También habrá obras gráficas —por ejemplo, cartelería de conciertos de rock de los años psicodélicos—, libros, revistas y material publicitario y audiovisual.