La próxima edición de las Bodas de Isabel de Segura, la recreación de la Leyenda de los Amantes de Teruel, se celebrará del 17 al 20 de febrero en la capital turolense. Por ello, se ha reunido la Junta Local de Seguridad para hablar del dispositivo que pondrá en marcha con motivo de estas fiestas, cuya principal novedad es que se controlará de forma especial la venta de alimentos en la calle.

El alcalde de Teruel, Manuel Blasco, ha explicado a los medios de comunicación tras el encuentro que la ciudad verá duplicada su población durante esos días, a pesar de lo cual es "una fiesta tranquila". No se esperan demasiados problemas y de ahí que el dispositivo vaya a ser muy similar al del año pasado, unas 400 personas entre Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil, Bomberos, Cruz Roja, 061 y seguridad privada.

Entre las novedades, Blasco ha destacado que habrá un especial control de "quién dispensa alimentos en la calle esos días", de forma que "ningún puesto que no esté autorizado va a estar en la vía pública, cualquier cuerpo policial que detecte un puesto que no tenga autorización lo pondrá a disposición de la Policía Nacional para que actúe como sea conveniente".

El alcalde ha aclarado que no es que haya habido problemas con estas cuestiones en años anteriores, "pero nos preocupa porque hace referencia a la salud de las personas". Así que ha recordado que "todas las tabernas tienen que tener sus autorizaciones y sus productos han tenido que pasar todos los controles".

Otra novedad, es que en las calles de la ciudad habrá un vehículo de comunicación de Protección Civil del Gobierno de Aragón que garantizará las comunicaciones. Así, "en caso de que hubiera un colapso de las líneas telefónicas todos los cuerpos de seguridad tendrían un dispositivo para seguir funcionando", ha apuntado Manuel Blasco.

Respecto del dispositivo policial, Blasco ha manifestado que la plantilla local "estará al completo ese fin de semana", mientras que la Policía Nacional "hará un refuerzo especial" y la Guardia Civil "se encargará de controles de accesos a la ciudad y de los controles de alcoholemia".

Por otro lado, el alcalde ha indicado que también, en esta ocasión, se habilitarán zonas de aparcamientos a la entrada de la ciudad que, estarán vigilados por Policía Local y por voluntarios de Protección Civil, un sistema que "ha funcionado bien en otras ocasiones".

Blasco ha destacado la "amplia colaboración" que hay entre todos los implicados en la seguridad de la ciudad durante esos días ya que "lo que se pretende que el dispositivo no tenga que intervenir porque todo transcurre con normalidad".