Los vecinos logran un paso de peatones tras dos meses de quejas

Debido a unas obras, alumnos de la ikastola y del instituto del barrio de San Adrián tenían que caminar por la carretera.
La acera provisional, unos metros más abajo, casi a punto.
La acera provisional, unos metros más abajo, casi a punto.
M. Toña
La acera provisional, unos metros más abajo, casi a punto.
Desde hace más de dos meses, los peatones del barrio de San Adrián corren peligro de ser atropellados. En un tramo de la calle Martin Barua, junto a la nueva rotonda de entrada al barrio de Miribilla, se está construyendo un edificio que ha tomado literalmente la acera, obligando a los que circulan por allí a hacerlo por la carretera.

La situación se agrava si se tiene en cuenta que la mayoría de los que pasan por esa zona a diario son los alumnos de la Ikastola Urretxindorra y del instituto San Adrián.

Después de varias llamadas de vecinos y padres de alumnos, los responsables de la obra decidieron por fin poner una acera y vallar la zona para permitir el paso de los peatones. Pero no ha sido fácil. «He estado tres semanas llamando a diferentes departamentos del Ayuntamiento, pero nadie hacía nada», comenta Karmelo, padre de uno de los alumnos de la ikastola, que ante la puesta en marcha del vallado se muestra satisfecho. «Ya era hora», dice. Con una pista facilitada por el lector Karmelo Martínez

2.100 atropellos en seis años

La muerte de dos niños a principios de año en Basurto ha hecho que sonaran las alarmas entre los ciudadanos de Bilbao. En los últimos seis años, en la capital vizcaína han ocurrido unos 2.100 atropellos y han fallecido 39 personas. Algunos padres de alumnos de los centros de San Adrián se mostraban preocupados ante la situación de la calle Martín Barua. «¿Tienen que morir niños para que nos hagan caso?». se preguntaba uno de ellos.

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