La Generalitat catalana pedirá la colaboración del Gobierno central en el conflicto de Salt

  • El conseller de Bienestar Social se reunirá con la secretaria de Inmigración.
  • Intentarán abordar el conflicto con menores extranjeros.
  • Quieren mantener la presencia policial e introducir educadores de calle.
  • CLAVES de los últimos altercados violentos en Salt.
Control policial de los Mossos en Salt.
Control policial de los Mossos en Salt.
Robin TowNsend / EFE
Control policial de los Mossos en Salt.

El conseller de Bienestar Social y Familia de la Generalitat, Josep Lluís Cleries, se reunirá este jueves con la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Anna Terrón, para pedir su colaboración a la hora de abordar el conflicto con menores extranjeros en Salt (Girona).

"Veré a la secretaria para poner hilo a la aguja y que el Estado colabore", ha afirmado Cleries en declaraciones a RAC1 y ha precisado que se encontrará con Terrón en Madrid coincidiendo con su asistencia a la conferencia sectorial de políticas sociales.

"Se debe actuar cuando antes mejor. En 15 días se deben empezar a notar unas actuaciones", ha remarcado el conseller, quien ha considerado que se debe mantener la presencia policial en Salt e introducir educadores de calle para los jóvenes y adolescentes.

"Salt es un paradigma de una cosa que ha pasado en Catalunya", donde unos pocos quieren romper el esfuerzo de integración y acogida por parte de inmigrantes y catalanes, ha valorado.

El papel de las redes sociales

La alcaldesa de Salt, Iolanda Pineda, ha considerado que los adolescentes implicados en la quema de vehículos y contenedores de la localidad se debieron de organizar a través de redes sociales como Facebook.

Los implicados en los altercados del viernes 14 de enero tenían entre 12 y 15 años y, algunos de ellos, venían de municipios vecinos como Celrà y Lloret de Mar, por lo que ha pedido que se investigue el papel de los móviles y de las redes sociales en la gestación de los disturbios.

Alguno de los tres menores detenidos la noche del sábado 15 al domingo 16 de enero --un chino, un hondureño y un español de 15 años-- "estaba en casa con su ordenador, y cuando sus padres se fueron a dormir, poco sospechaban que poco después saldría a quemar algún coche", ha explicado.

"Seguro que se hablaron por Facebook o por un chat y se les ocurrió la magnífica idea de ir a quemar coches", ha apostillado Pineda, quien ha abogado por instalar cámaras de videovigilancia en las calles y construir una comisaría regional de los Mossos d'Esquadra en el municipio.

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