El consumo de cigarrillos sigue cayendo en Cantabria y acumula un descenso de casi el 9 por ciento en los once primeros meses del año. En el lado opuesto, continúan las subidas en otros tipos de tabaco, en especial los de liar y para pipa.

Pese a todo, los cigarrillos siguen liderando el consumo de tabaco, a gran distancia de los cigarros (puros) y el tabaco para pipa y para liar, y su recaudación crece a pesar del descenso de las ventas, debido a las subidas de precios, tal como se constata en los últimos datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos.

Según esos datos, recogidos por Europa Press, hasta finales del mes de noviembre se vendieron en la región más de 44,6 millones de cajetillas de cigarrillos, frente a los más de 49 millones del mismo periodo de 2009, lo que supone un descenso del 8,9 por ciento.

No obstante, la recaudación subió un 5 por ciento, pasando de unos 141,5 millones de euros de enero a noviembre de 2009, a más de 148,6 millones en las mismas fechas de este ejercicio.

En total, el importe de las ventas de tabaco en Cantabria (sumados cigarrillos, puros, tabaco para liar y para pipa) creció hasta finales de noviembre un 6,42 por ciento, situándose por encima de 160,5 millones de euros, casi 9,7 millones más que en los once primeros meses de 2009.

Las ventas de cigarrillos siguen siendo las más destacadas. Los 44,6 millones de cajetillas (de 20 unidades) vendidas suponen un desembolso de 148.616.082 euros.

A continuación se sitúan las ventas de puros, con 26,8 millones de unidades vendidas (un 28,9% más que un año antes), lo que se ha traducido en una recaudación superior a 7,7 millones de euros (un 6 por ciento más).

Por su parte, de tabaco para liar se vendieron hasta noviembre 46.649 kilos (un 74,4% más que en el mismo periodo de 2009), por importe cercano a 4,1 millones de euros (+106%).

Y por lo que respecta al tabaco para pipa, aumentó también su consumo, pasando de 1.147 a 2.210 kilos, una subida del 92,67 por ciento, que en términos económicos se plasmó en un aumento del 69,2 por ciento, al pasar de unos 70.622 euros en los once primeros meses de 2009, a más de 119.500 euros en el mismo tiempo en 2010.