El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarron, ha valorado que el esquema provisional del Plan de Cuenca del río Tajo reconozca que las aportaciones anuales pluviales en los pantanos de cabecera se sitúen en torno a los 700 hectómetros cúbicos, y que hay un caudal suficiente que permita que los ecosistemas del río se puedan mantener, y haya reservas hídricas.

En declaraciones a los medios en las Cortes, el consejero se ha referido de esta manera al contenido de la reunión de la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Tajo, en la que se ha estudiado el esquema provisional de temas importantes del Plan Hidrológico del Tajo, encuentro en el que el Gobierno regional ha dejado de manifiesto que ésta será su preferencia.

Así, Pingarrón ha explicado que hasta el momento se permite trasvasar hasta 600 hectómetros cúbicos, planteamiento que se basa en que los pantanos de cabecera recogían en torno a 3.000 hectómetros cúbicos de agua al año. "Pero el plan habla de que se ha analizado y esa cantidad está en torno a los 700 hectómetros, y que si se quiere mantener el abastecimiento y el caudal ecológico quedan muy pocos recursos que son los que se pueden trasvasar".

Es por ello que ha insistido en que la exigencia de Castilla-La Mancha será la de mantener los caudales ecológicos, pero sin concretar una cifra, porque forma parte de la negociación del plan. "Debe haber un caudal suficiente para que todos los ecosistemas asociados al río se mantengan, se garantice la vida del río, y haya reservas para los asociados a los pantanos de cabecera".

El consejero ha explicado que aunque este documento no tiene condicionante de planificación, sí que recoge asuntos y prioridades que deben incluirse en el plan hidrológico, asuntos que más tarde formarán parte del borrador del plan, que saldrá a información pública antes de su aprobación final.

Según Sánchez Pingarrón, el esquema que se analizó este miércoles recoge avances importantes respecto a la posición de Castilla-La Mancha en la definición y la prioridad del río Tajo, como es la revisión de las normas de explotación del acueducto Tajo-Segura, "que consideramos que son absolutamente obsoletas, caducas y no se pueden mantener por más tiempo".

Pingarrón ha defendido que estos posicionamientos, que no son "viables" en estos momentos, hacen necesario que el plan futuro regule y establezca los caudales ecológicos, que es otra de las reclamaciones del Gobierno de Castilla-La Mancha para garantizar que el caudal del río Tajo tenga los suficientes metros cúbicos por segundo y se hable de una reserva de cuenca.

"Por parte de Castilla-La Mancha vamos a seguir exigiendo que los avances se vayan concretando y vaya a más, que el plan garantice todos los usos de la cuenca", ha dicho el consejero, que ha insistido en que el plan debe garantizar una reserva suficiente de agua en los pantanos de cabecera para los presentes usos y los futuros.

"Esa lámina de agua debe permitir usos recreativos o turísticos en los municipios ribereños. En las observaciones hemos hecho constar nuestra satisfacción por los avances conseguidos pero también la necesidad de seguir trabajando", ha insistido el consejero.