El Papa Benedicto XVI aterriza este fin de semana en nuestro país. Pasará 32 horas entre Santiago de Compostela y Barcelona y su visita será seguida por más de 150 millones de espectadores a través de la televisión, pero también por millones de internautas a través de la web que ha creado para la ocasión la Conferencia Episcopal.

El impacto económico que se calcula de esta visita es de 17 millones de euros en el caso de la capital gallega y de unos 30 en el de Barcelona.
Será la segunda estancia del Pontífice en España: estuvo en Valencia en verano de 2006 para presidir el V Encuentro Mundial de las Familias.

Consagración de la Sagrada Familia

En la Plaza del Obradorio, frente a la catedral compostelana, se colocarán 7.000 sillas para la misa que oficiará el Papa; 7.000 hostias se repartirán en la comunión y que llenarán los 175 copones que los "oleiros" de la localidad coruñesa de Buño, de reconocida tradición artesanal ceramista, han dado forma con sus manos.

Por otra parte, en la misa con la que el papa consagrará la Sagrada Familia de Gaudí se ha previsto que puedan comulgar unos 40.000 fieles, para lo cual serán necesarios unos 300 sacerdotes. En el oficio religioso, junto a Benedicto XVI, estarán 1.100 concelebrantes, entre obispos, arzobispos, cardenales y sacerdotes.

En Barcelona, Ayuntamiento y Arzobispado, que se gastarán cerca de millón y medio de euros en los diferentes actos programados con motivo de la visita papal, también se ha cuidado hasta el último detalle. Es el caso de las 50.000 banderitas que se repartirán entre quienes salgan a la calle para ver y saludar al pontífice.

La organización tendrá a mano, asimismo, 3.500 paraguas por si llueve. En el interior de la Sagrada Familia 6.500 personas serán testigos de su consagración, entre ellas los representantes de 35 países, y en el exterior se espera a una multitud de más de 36.000, que seguirán la ceremonia a través de más de 20 pantallas.

Periodistas acreditados

La cifra de periodistas acreditados asciende, según la Conferencia Episcopal Española, a 3.250, de los cuales 646 seguirán in situ toda la visita papal, 931 estarán sólo en la capital gallega y 1.673 en la Ciudad Condal. En total, 327 medios de comunicación, de ellos 208 españoles y 119 extranjeros.

En materia de seguridad, para garantizar que la visita del Pontífice transcurra sin problemas, el operativo desplegado por las Fuerzas de Seguridad del Estado será también de envergadura. Sólo en Santiago lo formarán unos 6.000 efectivos, entre 4.600 agentes de Policía, 1.200 guardias civiles y unos 500 miembros de Protección Civil.

Los voluntarios

En Barcelona, once manzanas de calles, las más próximas a la Sagrada Familia, se verán afectadas y no sólo el domingo. En Santiago de Compostela, su Arzobispado ha calculado que más de 200.000 fieles procedentes de toda España acudirán para ver y escuchar al Papa. Aunque en Barcelona las previsiones de visitantes son también optimistas, ni su Ayuntamiento ni el Arzobispado han dado una cifra.

Sí se sabe que llegarán a la ciudad unos 279 autocares con fieles de otras diócesis catalanas y del resto de España. Las dos ciudades han echado mano de los voluntarios: en Santiago serán 500 y en Barcelona superarán los 1.800, en este caso ataviados con un anorak de color azul con el logo del encuentro.

Y entre las curiosidades, los entre 100 y 4.000 euros que cuesta alquilar un balcón o una ventana estratégicamente situada y desde la que poder ver, el sábado por la mañana, el paso del "papamóvil" en su recorrido desde el aeropuerto hasta la catedral compostelana. O los 98.000 que costará la estatua de bronce, de 2,5 metros de altura, erigida en la ciudad en honor de Benedicto XVI, obra del escultor Cándido Pazos.