Por la calle todavía le preguntan cuándo vuelve a El Diario. Ahora, la presentadora vasca regresa a Antena 3 con El Marco, un reality en el que cada pareja –son ocho– convive en 20 metros.

¿Sería capaz de vivir en 20 metros cuadrados?

Me volvería loca, porque no puedo parar quieta y me aburriría a los cinco minutos.

Después de tantos años vinculada a un formato de testimonios, ¿le apetecía un reality?

El Diario tenía mucho de reality. Las emociones estaban tan a flor de piel que nunca sabías lo que iba a pasar. Lo mío es la gente anónima porque me encanta y lo disfruto. En El Marco me lo paso bomba.

¿Echa de menos esa etapa?

Dejar El Diario fue una decisión muy pensada. Guardo un recuerdo estupendo, pero no lo echo de menos ni siento nostalgia cuando lo veo. Además, ahora es El Diario de Sandra Daviú.

Pero para la audiencia sigue siendo El Diario de Patricia.

A mí me parece perfecto, pero a Sandra… por la calle me han llegado a preguntar si soy la de El Diario de Patricia... y que cómo me llamo.

¿Se siente encasillada?

No sé si es encasillar, estuve siete años en un talk show y la audiencia me identifica con eso. Pero no me importa.

¿Qué le propusieron después?

Cosas muy similares. Las rechacé porque no era el momento. Decidí tomarme un tiempo, relajarme y ver las cosas desde fuera.

Se rumoreó que Telecinco quiso ficharla...

Hubo propuestas, pero al final, nada.

Ahora que presenta El Marco, ¿entraría en un reality?

No, soy muy tímida. Prefiero verlos como espectadora, me parecen muy divertidos.

¿Cómo ve el sector audiovisual?

La televisión siempre ha estado difícil, incluso cuando estaba en El Diario. Fracasar es mucho más fácil que acertar, pero, ¿qué haces?, ¿te quedas en casa para no arriesgarte? Soy muy realista y sé cómo es este trabajo: hoy estás y mañana, no. En la tele no se pueden hacer planes, hay que vivir al día.

¿Le preocupan las audiencias?

No me obsesiono, pero cuando tengo un programa sí que miro los datos. Es la nota que te pone el telespectador.

¿Qué le dice su hijo, de cuatro años, cuando la ve en televisión?

Le parece absolutamente normal. Eso sí, me pregunta si yo desde la televisión le puedo ver a él (risas).