Un total de 65 pymes navarras están participando actualmente en alguna de las fases del Plan de Iniciación a la Promoción Exterior (PIPE), dirigido a pequeñas o medianas empresas (pymes) con una clara voluntad de internacionalización y el deseo de conocer sus posibilidades en otros mercados.

La iniciativa, gestionada y financiada en la Comunidad Foral por el ICEX, el Gobierno de Navarra y la Cámara Navarra de Comercio e Industria, ya ha contado con la participación de 180 empresas navarras desde su puesta en marcha.

En la Comunidad foral, en estos momentos están participando 12 empresas la fase 1, que tiene como objetivo contar con un diagnóstico que permita identificar empresas con potencial exportador. La fase 2, que dota a la empresa de un Plan de Internacionalización con el asesoramiento de promotores homologados y expertos en su sector concreto, cuenta con 14 participantes en este momento. El número de empresas que se encuentran en la fase 3 asciende a 28. Llegada esta etapa se pone en marcha el plan diseñado en la anterior, con el objetivo de facilitar a la empresa el acceso a los mercados con asesoramiento especializado.

Además, el PIPE dispone de un programa de seguimiento, cuyo objetivo es consolidar como exportadoras estables a las empresas que ya han participado en el programa y desarrollado su estrategia, en el que se encuentran 11 empresas navarras en la actualidad.

Desde la puesta en marcha del programa en la Comunidad Foral, todos los participantes han contado con el apoyo de un promotor que les ha guiado y asesorado en cada una de las fases, según ha informado la Cámara en un comunicado.

El éxito del programa

En toda España, desde finales del ejercicio pasado (últimos datos disponibles), más de 6.900 pequeñas y medianas empresas de todas las comunidades autónomas se han convertido en exportadoras. Además, la mayor parte de ellas (un 76%) han logrado exportar de manera regular, es decir, durante al menos cuatro años consecutivos.

El número de pymes que cada año se apunta al Plan PIPE ha crecido ininterrumpidamente en la última década y se ha mantenido en torno a los 750 nuevos exportares anuales en los dos últimos ejercicios, a pesar de la crisis.

Los resultados cosechados por esta iniciativa han motivado que las tres entidades responsables del programa a nivel nacional, el Instituto de Comercio Exterior (ICEX), las Cámaras de Comercio y las Comunidades Autónomas, hayan decidido dedicar 60 millones de euros al PIPE para los próximos cuatro años (periodo 2010-2014). El objetivo que todas las organizaciones se han marcado con este nuevo impulso al Plan PIPE es lograr que 3.000 nuevas pymes puedan consolidarse como exportadores en los próximos cuatro años.

Los beneficios

De acuerdo con los datos de un estudio realizado a nivel nacional, las empresas que han pasado por el programa han elevado en más de un 50% su producción, en un 48% sus ingresos totales y en torno a un 50% el número de empleados. Estos datos demuestran que la salida al exterior es una de las vías más idóneas para combatir la crisis y que los buenos resultados de las empresas participantes en el PIPE reflejan la efectividad del programa.

En concreto, las empresas PIPE muestran una evolución más positiva en la tasa de variación del empleo, que aumenta un 50%, frente a un crecimiento casi nulo de una muestra aleatoria de empresas, con el mismo perfil, que no han participado en el programa.

Además, en torno al 75% ha aumentado la plantilla con personal formado en comercio exterior, un 46% han creado un departamento propio de internacionalización gracias al PIPE y en el 83% de los casos sus empleados han ampliado la capacidad de comunicación en uno o más idiomas.

En cuanto a los datos de facturación, en empresas PIPE se ha detectado un crecimiento en torno a un 45% frente al 24% de las no han participado en el programa, y en producción las subidas son del más del 50% frente a un 15%.

Uno de los beneficios más claros del PIPE para las empresas participantes es el cambio en su perfil de internacionalización. Así, más de la mitad de las empresas que han pasado por el programa exportan actualmente más de un 10% de su facturación y un tercio de ellas más del 20%.

Otro de los datos significativos del estudio es que entre las empresas que comienzan a exportar a través del PIPE, se aprecia una mayor tendencia a vender en países fuera de la Unión Europea, como México, Estados Unidos, Marruecos o Emiratos Árabes, aunque los destinos de las exportaciones principales siguen siendo los países de la Unión Monetaria.