En declaraciones a Europa Press, López Aguilar indicó que la reforma consistirá en una escueta modificación de la Ley del Registro Civil, que dará cumplimiento al programa electoral del Gobierno socialista en esta materia.
La Ley no exigirá una operación quirúrgica de cambio de sexo a los solicitantes de la rectificación registral de sus datos de género y nombre, ya que, según destacó el ministro, esas intervenciones acarrean normalmente un importante sufrimiento a la persona.
Por ello, se solicitará la acreditación de la identidad de género por otras vías que están terminándose de perfilar técnicamente. López Aguilar señaló que la reforma legal "removerá barreras de discriminación por razón de género respecto a personas de carne y hueso que han sufrido durante años marginación y exclusión de forma innecesaria e inhumana, y además mejorará su inserción social y laboral".
Directiva europea
Además, subrayó que cumple un mandato del Parlamento Europeo, de 1989, pendiente de cumplimiento por España, que instaba a los Estados miembros de la UE a acabar con todas las formas de discriminación contra estos colectivos. El objetivo, en palabras del titular de Justicia, es que "las personas que sufran la contradicción entre su identidad de género y sus datos del Registro Civil puedan conformar éstos a su realidad".
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