El pleno del Parlamento vasco expresó hoy su solidaridad con todas las personas que sufren la amenaza de la banda terrorista ETA y, en concreto, mostró su apoyo al trabajo de los empresarios y profesionales que en las últimas semanas han sido víctimas de su última campaña de extorsión.

La enmienda de transacción apobada fue firmada por PSE, PP y UPyD a una proposición no de ley del populares, relativa a la última remesa de cartas de extorsión enviadas por la banda terrorista ETA dirigida a "a empresas y profesionales liberales del País Vasco y Navarra", en las que se exigen cantidades que oscilan entre los 80.000 y los 400.000 euros.

En la iniciativa acordada por todos los grupos, el Parlamento expresa, en el primer punto, su solidaridad con todas las personas que sufren la amenaza de la banda terrorista ETA y, de manera "singular", reconoce y apoya el trabajo de los empresarios y profesionales que en las últimas semanas han sido víctimas de su última campaña de extorsión.

En un segundo punto, la Cámara vasca reitera su apoyo a la Ertzaintza y a las demás Fuerzas de Seguridad del Estado para que, "cuanto antes, los responsables de estas prácticas criminales sean puestos a disposición de la Justicia".

Este respaldo fue apoyado por todos los grupos excepto Aralar, que se abstuvo al defender que los principios ideológicos de su formación rechazan que las Fuerzas de Seguridad del Estado actúen en Euskadi. "Ésta es una posición política legímitima", defendió su portavoz, Aintzane Ezenarro.

El parlamentario del PP Carlos Urquijo, por su parte, pidió a los representantes del empresariado que "no cedan al chantaje", aunque reconoció que este punto no se ha incluído en la enmienda de "mínimos" firmada para conseguir el apoyo unánime de la Cámara.

En este sentido, apostó por hacer una reflexión para plantear "qué sería de este país si los cientos de miles de vascos que son no nacionalistas no hubieran encontrado candidatos a los que votar porque quienes les representamos hubiéramos cedido al chantaje de ETA y no hubiéramos tenido el valor de presentarnos a las elecciones". "Si no hubiera representación del PSE, PP y UPyD, ¿qué país tendríamos? Un desastre de país", insistió.

Para Urquijo, sería un "desastre" que haya gente que, "ante un temor lógico y razonable, tomara la decisión equivocada que es pagar a la banda terrorista". Asimismo, rechazó que se soliciten comportamientos heróicos, aunque "sí actitudes ejemplares".

"Muchos también dimos la talla cuando éramos concejales y no teníamos escolta. Por eso, nos sentimos con la autoridad moral para pedir a otras personas que están en la misma situación de temor y miedo ante una amenaza terrorista para que no paguen, porque supone la perpetuación del terrorismo", insistió.

Al respecto, el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, defendió que "no es lo mismo pagar que no hacerlo, ni ceder al chantaje de los terroristas que resistir y negarse a que el dinero se transforme en balas que asesinen a los ciudadanos". "La actitud de resistir es la que el Parlamento debe agradecer", indicó.PNV

El parlamentario del PNV Joseba Egibar recordó que este debate se trae "cada cierto tiempo" a la Cámara y que, con esta actitud, se da "juego" a ETA que es lo que la banda pretende. Además, consideró que la iniciativa se debería haber planteado como una declaración institucional y no como un debate.

Egibar señaló también que cada semana pasan por la Audiencia Nacional personas que pagaron a la banda y denunció que actualmente, en relación con las penas que se aplican, "es más grave recibir la carta y no presentar denuncia ante la Policía que el hecho de pagar".

Desde el PSE-EE, José Antonio Pastor, apoyó a las personas que sufren amenazas de ETA y a los profesionales que han sido nuevamente objetivo de cartas de la banda, y acusó a los grupos de "desviar el tema" con las decisiones que deben tomar los empresarios.

Además, criticó la abstención de Aralar, e insistió en que el texto no hace una declaración de simpatía ni de adhesión a las FSE, sino que dice que, quien opera en este país, la Ertzaintza, la Policía Nacional y la Guardia civil persigan a los responsables de las cartas. "No se puede esconder la realidad el bajo ropaje de determinada opción ideológica", defendió.

La portavoz de Aralar, por su parte, señaló que es "evidente" que "todos condenamos el chantaje y la extorsión", pero defendió que, "dentro de la libertad personal, está cómo cada uno ve la situación y la gestión del miedo.

En este sentido, subrayó que "hay personas que viven bajo la amenaza en esta Cámara y fuera de ella, y que algunas no tienen protección, por lo que "pedirles a esas perosnas que se conviertan en héroes por parte de los que sí la tienen, me parece muy resbaladizo".

El parlamentario de EB, Mikel Arana, afirmó no entender el objetivo de la iniciativa, y recordó que en el Cámara "existen unos consensos que no son mínimos, sino firmes y amplios en contra de ETA".

Arana mostró su respaldo al texto, pero no quiso entrar a decir qué actitud deben tener los empresarios ante una situación de extorsión. "Ellos no están todo el día escoltados y se están haciendo grandes injusticias desde la Justicia con ellos", concluyó.