En concreto, se ha referido al "incumplimiento reiterado" en el Ebro a su paso por Zaragoza de la Normativa de las Condiciones Generales de las Autorizaciones de Navegación de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), "creando claras situaciones de riesgo innecesario por no respetar las distancias de seguridad permitidas en la Normativa, como ya denuncio en el Ayuntamiento en pleno de fecha 28 de mayo de este mismo año y en julio del año pasado".

Desde esta asociación vecinal se ha denunciado la colocación de las boyas a escasos 70 metros del azud, "cuando deberían estar situadas a 150 metros, que es la distancia permitida por la CHE específicamente a la empresa Turismo Ebro Fluvial por dicho Organismo".

De igual manera, han solicitado que se garantice la señalización en el canal navegable por el "riesgo humano que conlleva una señalización deficiente", de acuerdo con la Normativa de Seguridad Marítima y las Normas de Balizamiento de canales y obstáculos varios que "puedan representar un peligro para la navegación".

En cuanto a la documentación administrativa, "por la gravedad y responsabilidad que conlleva, se ha exigido la presentación del Certificado de Navegabilidad de los barcos, el Diario de Navegación y el preceptivo Libro de Rol, todo ello correspondiente a los años 2008, 2009 y 2010".

Así mismo, y para concluir se ha vuelto a denunciar el hecho del "riesgo y los problemas que pueden acarrear la inexistencia de un lavadero de embarcaciones, para cumplir así con el Protocolo de Desinfección de Embarcaciones y Equipos, y evitar así la exportación y propagación del temible Mejillón Cebra a otra cuenca", concluye el comunicado de la asociación vecinal.