Los taxistas han considerado injuriosas las informaciones vertidas por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en un estudio publicado recientemente. y dos de sus asociaciones más representativas no han tardado en ponerse en marcha. La Asociación Gremial de Auto-Taxi de Madrid (AGTM) y la Unión Nacional del Taxi (UNALT) han iniciado los trámites para adoptar "medidas legales" contra la OCU.

Estas organizaciones gremiales se refieren a un estudio de la OCU en el que se han detectado 523 infracciones en 193 recorridos de taxis, como falta de información en tarifas y datos para identificar el vehículo o rodeos injustificados, más frecuentes en Sevilla, Bilbao o Madrid.

"La intención de difundir este contenido insidioso no es otro que perjudicar a uno de los mejores transportes públicos como es el taxi y conseguir notoriedad por parte de dicha organización de consumidores", ha declarado el presidente de AGTM y UNALT, José Luis Funes, en un comunicado, quien ha considerado que la OCU utiliza titulares "sensacionalistas" que no son reales y que buscan "sólo manchar el buen nombre" del taxi y sus profesionales.

Asegura que es "sorprendente" tan elevado número de infracciones cuando este sector, en su conjunto, es el que registra el "menor número de reclamaciones" en las oficinas de consumo.

"Tanto desde la asociación mayoritaria de Madrid como desde la Unión Nacional -concluye-, hemos iniciado los trámites para adoptar las medidas por vía legal para proteger al sector del taxi y evitar este tipo de informaciones claramente injuriosas y enfocadas a conseguir notoriedad a costa de vilipendiar su buen nombre", concluye la nota.

Por su parte, la Confederación del Taxi de España (CTE) también se ha pronunciado y ha señalado que el análisis llevado a cabo es "poco científico" y "totalmente parcial" ya que la muestra en la que está basado es "poco demostrativa".