De igual modo, apostó por aplicar políticas preventivas, de carácter informativo y educativo, tanto en la sociedad como en los centros escolares y, también, dentro de las propias familias, para acabar con estos "crímenes repugnantes", para que se conviertan en un "capítulo vergonzoso de la historia" en vez de que sean "una realidad tan hiriente del presente".

El presidente del país azteca respondió así a preguntas de periodistas relacionadas con supuestos abusos a menores por miembros de Los Legionarios de Cristo, y ante la posibilidad de que exista una red de pederastia infiltrada en la Iglesia Católica.

En una rueda de prensa ofrecida en Comillas al término de la V Cumbre UE-México, Calderón destacó la apuesta de su país por que los responsables de delitos de pederastia sean juzgados y se les aplique el "rigor de la ley", independientemente de si se trata de organizaciones sociales o religiosas.

Así, defendió necesidad de "ser firmes" en el "respeto incondicional y absoluto" de cualquier persona, especialmente si se trata de un menor. Además de adecuar la legislación, el presidente mexicano apostó por potenciar y renovar el esfuerzo que se hace desde las instituciones, la policía o la justicia. También subrayó la importancia de prestar ayuda económica y psicológica a las víctimas y a sus familias.

Calderón aprovechó para recalcar el compromiso de su gobierno para combatir delitos de pederastia y, también, el crimen organizado, con el fin de evitar casos como el secuestro del político Diego Fernández de Cevallos, que desapareció en la madrugada del sábado.

"Cada caso que se presenta en nuestro país", dijo, "es un motivo más para redoblar el compromiso del Gobierno de combatir frontalmente al crimen organizado en cualquiera de sus expresiones".

El objetivo de todo ello es, según concluyó, "cumplir el anhelo" de los mexicanos de tener una "patria segura" donde los ciudadanos puedan "vivir en paz" y cuenten con la debida "seguridad".