La presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, aseguró hoy que es preciso "seguir adelante" con el proyecto del Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia, en el caso de que no haya "consenso", debido a que exista "una falta de voluntad" para alcanzarlo.

Además, pidió al Gobierno vasco que haga uso de "todas las capacidades que tiene para luchar contra la crisis", porque es un tema que "preocupa a todos".

En una entrevista en el diario Deia, recogida por Europa Press, Quiroga señaló que "sería deseable que se hagan todos los esfuerzos necesarios" para que el PNV se sume al citado Plan de Convivencia Democrática.

"Desde el PP, estamos dispuestos a echar una mano y hacer de puente para que el plan esté cuanto antes en las aulas. Las cuestiones que han levantado más ampollas o que quizás no se han entendido bien, todo eso, es reconducible para llegar a buen puerto. Es lo que espero", añadió.

A su entender, "lo ideal" sería lograr "el mayor consenso posible", aunque advirtió de que "no se puede condicionar una iniciativa, que a priori todos sabemos que es buena, para que no salga adelante".

Primer año de gobierno

Preguntada por el primer año del lehendakari Patxi López al frente del Gobierno vasco, reconoció que se han dado "avances importantes" en cuestiones como "las actitudes respecto a la lucha contra el terrorismo y en ganar espacios de libertad".

Sin embargo, señaló que "hay otros aspectos en los que los ciudadanos vascos" están "esperando decisiones importantes", por ejemplo, en materia educativa.

"Y luego está el tema que ahora mismo preocupa a todos, que es la crisis económica. Ahí le estamos exigiendo que utilice todas las capacidades que tiene para luchar contra la crisis", remarcó.

Cámara vasca

Por otra parte, Quiroga negó que el Parlamento que preside se encuentre dividido entre dos bloques, nacionalistas y constitucionalistas, puesto que esta legislatura está siendo "una de las que más juego está teniendo y en la que podemos ver cómo los votos y las mayorías van cambiando en función de los temas a tratar".

A su entender, se ha logrado "activar de una manera muy importante la actividad del Parlamento, sobre todo, en cuanto a iniciativas que están muy pegadas a la calle".

Respecto a las cuestiones identitarias, reconoció que es "inevitable" que sigan teniendo presencia en el debate parlamentario porque los grupos políticos son quienes "deciden" qué temas se tratan en pleno o comisiones.

Asimismo, respecto a la decisión del ex presidente del Parlamento Juan Mari Atutxa, de no acudir a la celebración del 30 aniversario de la Cámara, Quiroga dijo que trató, sin lograrlo, de que reconsiderara su ausencia, por la que mostró su "respeto".

Además, indicó que la Mesa del Parlamento trata siempre de "ceñirse" al Reglamento cuando rechaza o aprueba las iniciativas de los grupos, al margen de quién sea el que las propone.

En cuanto a las ausencias del lehendakari de los plenos y de las sesiones de control al Gobierno, recordó que ya ocurría con el anterior jefe del Ejecutivo vasco, puesto que es una realidad que "hemos vivido durante años y no pasa nada".

Municipales y forales

Sobre las próximas elecciones municipales y forales del año que viene, aseguró que sería "hacer cábalas" el hecho de dar por seguro que el PP vaya a pactar con el PSE-EE, puesto que su partido "primero tiene que sacar un buen resultado" para analizar posteriormente la situación y los pactos. "Ahora mismo todas las posibilidades están abiertas y eso nos constriñe al PSE", añadió.

Quiroga también defendió la labor parlamentaria del PP, que exige al Gobierno vasco "lo que cree que es importante", al margen de que sea su socio preferente y le haya permitido lograr la elección de López como lehendakari.

Respecto al caso Egunkaria, en el que han sido absueltos sus responsables de la acusación de colaboración con ETA, destacó que es preciso "ser respetuosos con las sentencias de los tribunales".

Sobre la izquierda abertzale ilegalizada y sus últimos movimientos, afirmó que "no tienen ninguna credibilidad" porque "cuando uno se quiere separar de ETA y quiere realmente hacer política, lo tiene muy fácil". Además, señaló que el Estado de Derecho "tiene que estar vigilante para que se cumpla la ley".

"Reunirse con un grupo que no respeta el derecho a la vida y que no condena los atentados de ETA —como ha hecho el PNV al reunirse recientemente con Batasuna—, aunque los jueces hayan dicho que no es delito, a mí me sigue pareciendo moralmente reprobable", concluyó.