El Gobierno aragonés desistió hoy, formalmente, continuar el recurso judicial contencioso-administrativo interpuesto contra el Gobierno de España a causa de las denominadas mermas tributarias tras alcanzar un "acuerdo razonablemente bueno".

El Ejecutivo autónomo aprobó un Decreto Ley en este sentido. En la rueda de prensa posterior a la reunión de Consejo de Gobierno, el vicepresidente José Ángel Biel, se expresó de este modo. "El acuerdo está bien" y cuenta con el apoyo de las Cortes autónomas, el Consejo de Estado y el Consejo Consultivo de Aragón, recordó el vicepresidente.

Biel expresó que con este acuerdo "se da fin a un procedimiento" y opinó que "el tema está suficientemente debatido", por lo que prorrogar el asunto sólo sirve para "darle más hilo a la cometa".

El también portavoz del Ejecutivo aragonés aseveró que "hay que terminar aquí" el asunto porque "se ha resuelto bien", a lo que añadió que había "muchas posibilidades" de que la Comunidad Autónoma perdiera el litigio judicial por "razones jurídicas".

A esto añadió que, de haber continuado la causa judicial, al Gobierno de España "se le abría un melón difícil de cerrar". Biel comentó que hay un plazo de unos seis meses para concluir el proceso. "El rebufo ya se terminará algún día". DECRETO

El Decreto aprobado hoy aprueba transigir con la Administración General del Estado en los términos fijados en el Acuerdo de la Comisión Mixta de Asuntos Económico-Financieros Estado-Comunidad Autónoma de Aragón de 15 de septiembre de 2009 relativos a las mermas tributarias.

La decisión viene precedida por los informes favorables emitidos tanto por el Consejo de Estado como por el Consejo Consultivo de Aragón. En cualquier caso, la transmisión de los bienes a que se refiere el Decreto queda condicionada a que se dicte, por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, el auto de aceptación del desistimiento.

De esta manera, tanto el Gobierno de Aragón como la Administración General del Estado dan por definitivamente resuelto el conflicto y por cumplido lo previsto en la disposición transitoria primera del Estatuto de Autonomía de Aragón con renuncia al ejercicio de cualquier acción que pudiera corresponderles.

Las mermas tributarias son el resultado de la decisión de sucesivos Gobiernos centrales de modificar la normativa sobre tasas e impuestos recortando la cantidad que correspondía a las Comunidades Autónomas, lo que en el caso de Aragón se situó en más de 500 millones de euros.

El consejero de Economía del Gobierno autónomo, Alberto Larraz, negoció con el Gobierno central el pago de las mermas, alcanzando un acuerdo mediante el cual el Ejecutivo aragonés recibirá más de 50 millones de euros en dinero 'cash', así como varios edificios del recinto de la Avenida de Ranillas donde estuvo ubicada la Exposición Internacional Zaragoza 2008, junto con 120 viviendas y varios parques de maquinaria. El acuerdo suscitó un intenso debate parlamentario.