Los organizadores (entre ellos la confederación de padres católicos y el Foro de la Familia) advirtieron tras conocer la noticia que no quieren un encuentro «cordial pero vacío» y aseguraron que  llevan «meses y meses reclamando una reunión con Zapatero para entregarle 3,5 millones de firmas que exigen que la asignatura de Religión tenga el mismo tratamiento que cualquier otra», una de las principales peticiones de estas asociaciones.

El Gobierno, por su parte, ha criticado que el PP y los obispos apoyaran una manifestación en la que se dijeron «un cúmulo de falsedades. Cuando la LOE esté en vigor, se comprobará que los padres que quieran religión para sus hijos la tendrán, que habrá libertad para elegir el colegio y que las familias tendrán más becas». El PP ha pedido a Zapatero que «escuche el clamor social» y retire la ley.

El martes, miles de estudiantes se manifestaron en 30 ciudades de toda España también contra la LOE. Los estudiantes creen que esta  ley perjudica a la educación pública y beneficia a la concertada (privada sostenida con fondos públicos).

Manifestación: guerra de cifras

Siempre que hay una manifestación se produce una baile inevitable de cifras. La del sábado no fue una excepción. Según los convocantes acudieron a la marcha dos millones de personas. La Comunidad de Madrid rebajó esta cifra a 1,5 millones y la Delegación del Gobierno, a 407.000. Pero, ¿qué datos dio la prensa?

El País: Cifró en 375.000 los asistentes.

El Mundo: No dio datos propios y sólo recogieron los que dieron los convocantes y Delegación del Gobierno.

ABC: Tampoco dio cifras propias.

La Razón: No se aventuró a dar datos propios, aunque aseguró que «el número de manifestantes que acudió desbordó las previsiones».