Este jueves ha sido día de 'resaca' tras el intenso debate sobre la crisis económica celebrado el día anterior en el Congreso. Los líderes políticos han hecho diversas valoraciones sobre la comisión creada por el Ejecutivo para buscar un pacto anticrisis y mientras José Luis Rodríguez Zapatero ha contestado con un escueto "me alegro" al ser preguntado por la decisión del presidente del PP, Mariano Rajoy, de que su partido acuda a las reuniones de la comisión; el líder popular ha comentado que el Gobierno sólo quiere "distraer la atención, hacer barullo y un poco de ruido más".

Zapatero, en un acto de la Conferencia Empresarial Española de la Economía Social (CEPES), ha insistido en que España superará la crisis "con responsabilidad colectiva" y "poniendo el interés general por encima del particular".

Sin embargo, Rajoy ha continuado con sus críticas y ha denunciado que Zapatero "no sabe exactamente qué hacer" con la crisis económica, por lo que intenta "distraer la atención con una comisión" para intentar que la situación "escampe" y los socialistas puedan recibir la ayuda "del cielo".

Además, Rajoy volvió a cuestionar la utilidad de una moción de censura ya que sería un debate que duraría 24 horas "y al día siguiente" el país estaría "exactamente en la misma situación" que ahora. Por ello, considera que las únicas soluciones son: que el Ejecutivo rectifique su política, convoque elecciones o que cambie de presidente*.

Opinión de PNV e IU

De momento, el Gobierno continúa con la ronda de contactos con los diversos grupos políticos y que empezó el pasado martes con CiU. Durante la mañana de este jueves ha sido el turno del portavoz del PNV, Josu Erkoreka, quien, tras reunirse con su homólogo socialista, José Antonio Alonso, ha afirmado que si el PSOE busca un contrato de adhesión "incondicional" a su plan económico para consensuar un pacto de Estado contra la crisis, "no contará con nosotros".

Por su parte, Izquierda Unida e ICV se han mostrado pesimistas ante la posibilidad de que el Gobierno tenga en mente un gran pacto "por la izquierda" para superar la crisis, y han avisado de que no darán apoyo parlamentario a "recortes quirúrgicos" ni traspasarán la "línea roja" de alargar la edad de jubilación.