CC.OO., UGT y la patronal pontevedresa esperan que el acuerdo para la negociación colectiva acabe con la conflictividad

CC.OO., UGT y la patronal pontevedresa mostraron hoy su confianza en que la ratificación que realizaron hoy del acuerdo para el empleo y la negociación colectiva firmado por sindicatos y emprendedores a escala nacional sirva para "cambiar la imagen de conflictividad existente en la provincia", tal y como aseguró el presidente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), José Manuel Fernández Alvariño.

Durante el acto de firma de este convenio, en el que estuvo ausente la central CIG, Alvariño destacó la "unión" y el "entendimiento" que marcarán las relaciones entre los distintos agentes para mantener la paz social y para que Pontevedra en su conjunto pueda continuar siendo "el motor económico de Galicia".

El representante de la patronal pontevedresa remarcó que los puntos de acuerdo entre empresarios y trabajadores "son posibles" y esperó que sirvan para poner fin a la "fuga de inversiones" que se viene sufriendo "por culpa de la conflictividad".

Igualmente, trasladó la consecución de este encuentro a la clase política para que Pontevedra deje de ser "la provincia del no" y que se agilicen los proyectos, de tal manera que se materialice la "sensación" de que su economía "puede emerger".

Por su parte, el secretario comarcal de UGT en Vigo, Antonio Juste, manifestó su deseo de que este acuerdo proporcione a Vigo "la paz social que necesita" y sirva para dejar atrás un 2009 "marcado por la conflictividad". No obstante, asumió que "surgirán diferencias" y que las partes implicadas deberán saber "limarlas".

Mientras, su homólogo de CC.OO., José Cameselle, apuntó que este nuevo acuerdo "requiere responsabilidad" porque en él se introducen "temas de mucho calado" que deben "contribuir a salir de la crisis". Asimismo, avisó de que la mejora de la economía que se puede registrar en 2010 "no implica" que se vayan a reducir las listas del paro. PREVISIONES

Además, Juste reconoció que las perspectivas para la industria de la automoción y para el sector naval, de las que depende en gran medida el mercado laboral de la comarca de Vigo, "no son muy halagüeñas" debido al posible descenso de la venta de vehículos y a la falta de pedidos para construir buques.

Por ello, demandó que las administraciones mantengan las ayudas destinadas a la compra de vehículos y dijo que espera que los astilleros puedan cerrar acuerdos a través de las misiones comerciales que están llevando a cabo en el extranjero.

En la misma línea se pronunció Alvariño, que confió en que la Xunta de Galicia conceda nuevas subvenciones para la adquisición de automóviles para que la industria "pueda seguir tirando" y recordó que el naval se está "moviendo" para aumentar su cartera de pedidos.