El alcalde de Vigo, Abel Caballero, auguró que la manifestación convocada para mañana para mostrar el rechazo a la fusión de Caixanova y Caixa Galicia congregará a "docenas de miles de personas", ya que así se lo "transmitieron" diferentes colectivos y ciudadanos.

En rueda de prensa, el regidor evitó dar una cifra concreta de asistencia que pudiera ser valorada como un éxito de participación pero mantuvo en todo momento que serán "muchísimos" los vigueses que se darán cita a partir de las 20.00 horas en el cruce de Vía Norte y la calle Urzáiz para dirigirse posteriormente hacia la Puerta del Sol.

Caballero hizo hoy un "llamamiento a toda la ciudad" para que "defienda" su "capacidad" y su "liderazgo" económico dentro de la comunidad y apuntó que el acto carece de "color político" porque se trata de preservar la "dignidad" de Vigo, de tal manera que la ciudad "sea tenida en cuenta" y "nunca más se vea amenazada".

El alcalde también criticó a los partidos y agentes sociales que apoyan la fusión y la nueva Ley de Cajas gallega porque ésta buscaba el "único objetivo" de "eliminar" a los cargos directivos de Caixanova que "no atendieron a la imposición" de apoyar la integración de las dos entidades financieras.

El bng denuncia presiones

Por su parte, el teniente de alcalde vigués, el nacionalista Santiago Domínguez, denunció que algunos colectivos de la ciudad recibieron presiones para que "se pronunciaran en uno u otro sentido" y lamentó que se utilicen cargos representativos de la ciudad para lograr un posicionamiento.

En rueda de prensa, Domínguez lamentó que algunos clubes deportivos suspendieran los entrenamientos previstos para mañana por la tarde para facilitar a sus miembros y a los familiares de los niños de las categorías inferiores la asistencia a la manifestación.

En todo caso, el dirigente nacionalista insistió en que "cualquier ciudadano está en su derecho de asistir" a la movilización, aunque señaló que ésta "no defiende" a Vigo, sino la creación de un Sistema Institucional de Protección (SIP) que "se lleve" el poder de decisión financiero fuera de Galicia.

Por último, reiteró su predisposición a acudir al acto promovido por el alcalde siempre y cuando el Gobierno y el Banco de España "anulen las restricciones" impuestas para solicitar el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que impiden a Caixanova acogerse a él por sí misma.