El precio del agua se ha incrementado en un 28% desde 2005. Así lo asegura un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) publicado este miércoles, que estima en unos 227 euros la factura media anual de una familia estándar (175 metros cúbicos).

Para su estudio, la OCU ha recogido muestras en 60 localidades y ha comparado los precios de 64 ciudades para constatar si las "enormes diferencias", observadas en el último informe de 2006, se mantenían en la actualidad.

Murcia encabeza el ranking de las diez ciudades españolas que tienen un precio del agua más caro, con 413 euros; seguida de Molina de Segura con 399; Palma de Mallorca, con 380; Alicante, 360; Cádiz, 357; Barcelona 339; Las Palmas de Gran Canaria, 332; Sevilla, 327 euros; Valencia, 319; Santa Cruz de Tenerife, 314; Ceuta, 308; Tarragona, 301 y Granada, 296.

Por el contrario, según los datos de la OCU, las localidades más baratas son Valladolid, donde el precio medio del agua es de 167 euros; seguida de Santander, 158; Segovia, 158; Vitoria, 156; Orense, 153; Melilla, 146 euros; Soria, 141; Burgos, 140; Ávila, 137; Guadalajara, 134; Palencia, 114; Don Benito, 112 y Almussafes, donde el coste es de cero euros.

La OCU señala que siguen existiendo enormes diferencias en el precio del agua. En 13 de las 64 localidades analizadas por la OCU, en lugar de cuota de abono, se factura una cantidad fija que incluye una cantidad de metros cúbicos (entre 60 y 180 al año), según la ciudad.

La OCU considera que establecer un mínimo demasiado elevado puede incitar al "despilfarro", ya que puede haber consumidores que gasten un volumen inferior y deban pagar por ese mínimo. Además, esta "disparidad" de precios se observa también en el precio del saneamiento o en cobro del equipo de medida.