El Billabong Pro Mundaka, octava prueba del Mundial de Surf, empezó de la mejor forma posible.

Este lunes, en el primer día del periodo de espera –el campeonato tiene entre el 5 y el 17 de octubre para terminarse, dando así un margen de casi dos semanas para descartar las jornadas en las que no hay olas buenas–, ya se pudo disfrutar en la localidad vizcaína de "la mejor ola de izquierdas de Europa".

Dos surfistas locales, de Zarautz, Hodei Collazo y Marcos San Segundo, analizan para 20 minutos por qué es tan famosa. "Es una de las diez olas que todo surfista profesional quiere pillar. En el surf, la maniobra más espectacular son los tubos y Mundaka es una ola de tubos", comenta Collazo (25 años), quien llegó a la prueba con un wild card (invitación) y que este lunes cayó en la primera ronda ante el hawaiano Kekoa Bacalso.

"Sientes que tiene mucha fuerza y que vas muy rápido encima de ella. Es una ola larga, que puede alcanzar los 200 metros de longitud", asegura San Segundo, surfista júnior, de 19 años, que también competirá por invitación. La explicación de estos tubos está en el fondo de la ría: "Es de arena y cubre muy poco. Por eso, todas las olas son diferentes".

Caprichosa y sin peligro

Los bajos arenosos hacen que no sea una ola "peligrosa. No es lo mismo que caerte sobre roca o coral", reconoce Collazo. "Aun así, por suerte, yo nunca me he dado ninguna leche", añade San Segundo.

Las mejores condiciones para Mundaka son "marea baja, viento sur y olas de 2 metros", coinciden ambos.

También destierran el mito que vincula siempre el surf con el sol. "Para que esta ola sea buena, tiene que haber borrasca. La mejor época es ahora. Diciembre, enero y febrero también son buenas fechas, pero hace muy mal tiempo", dice Collazo. "En verano no hay olas de calidad", concluye San Segundo.

El espectáculo ha comenzado y pronto entrarán en acción, entre otros, Kelly Slater, nueve veces campeón del mundo; Joel Parkinson, que lo puede ser en Mundaka; o C. J. Hobgood, vencedor en 2008.