La presa de Susqueda (Girona) sustituirá sus cuatro válvulas de desguace de agua del embalse en un proceso que costará 800.000 euros y que será la primera renovación de estos equipos desde que se inauguraron las instalaciones en 1968, ha explicado el director de la central hidroeléctrica de Susqueda, Joaquim Llop.

Los trabajos empezarán este mes y durarán unos ocho meses, ya que el proceso de sustitución requerirá de dos meses para cada válvula --de 1,5 metros de diámetro cada una--, con la intervención de un equipo de buzos que deberán maniobrar a 70 metros de profundidad.

El pantano de Susqueda es el segundo más grande ubicado en territorio catalán, por detrás de Rialp, y se encuentra en la cuenca del Ter. De él se consigue electricidad a través de la central hidráulica de Susqueda --de 70MW de potencia-- y se extrae agua para Girona y Barcelona.

La renovación de las cuatro válvulas permitirá mejorar la regulación del embalse de Susqueda, que actualmente se encuentra a un 72% de capacidad.

Endesa, responsable de la presa y la central hidroeléctrica de Susqueda, presentó recientemente una denuncia en Girona por la construcción de una cantera a menos de tres kilómetros de la presa.

La eléctrica alegaba que la empresa que está abriendo la cantera todavía no contaba con los permisos necesarios, no aseguraba que su actividad de voladuras con dinamita no afectase a Susqueda con las vibraciones resultantes y utilizaba una carretera titularidad de Endesa sin pedir autorización, con el paso de camiones de gran tonelaje.