La teniente de alcalde y delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, se mostró este viernes "radicalmente en contra" de regularizar la prostitución, un régimen de semi-esclavitud que, de legalizase, sería como legalizar al proxeneta, dijo.

Botella hizo estas declaraciones en referencia a las realizadas el pasado lunes por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien se mostró "partidaria" de regularizar esta práctica, algo compartido por el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, quien pidió una ley que prohíba la prostitución en la calle.

No obstante, la Generalitat descartó endurecer próximamente las leyes para combatir la prostitución.

La teniente de alcalde calificó la prostitución como un régimen de "semi-esclavitud que va en contra de la dignidad de la mujer, en contra de la dignidad de cualquier ser humano y detrás del cual hay auténticas mafias".

Puntualizó que las mujeres que se prostituyen en Madrid son en un 80-90% inmigrantes sin papeles y son manejadas por un proxeneta.

Campañas del Ayuntamiento

Desde el punto de vista de Botella, "si legalizamos la prostitución, estaremos legalizando al proxeneta que hay detrás y que maneja grupos de mujeres".

La teniente de alcalde no dijo si el Ayuntamiento madrileño seguirá el ejemplo del de Barcelona y pedirá que se prohíba esta práctica en la calle, tal y como han solicitado los vecinos de la calle de la Montera.

Botella sí recordó las campañas que desde hace seis años lleva a cabo el Consistorio para disuadir a los clientes de la prostitución.