La repentina muerte este jueves de Michael Jackson deja huérfanos a miles de fans del 'rey del pop'. El cantante tenía previsto iniciar una serie de conciertos en Londres entre el 13 de julio y marzo del 2010 y pasó los últimos dos meses de su vida en Los Angeles ensayando grandes éxitos como Thriller y Billy Jean.
Las entradas para sus
50 conciertos en Londres se
agotaron cinco horas
después de salir a la venta el pasado mes de marzo. El cantante
anunciaba poco antes su regreso a los escenarios tras 12 años de su última gira en directo y después de no haber grabado un disco con temas nuevos desde 2001. Según la prensa británica, el artista norteamericano había
"llorado de alegría" al saber que sus conciertos habían completado su aforo.
Jackson, quien comenzó su carrera musical de niño hace
más de cuatro décadas como integrante de 'Los Jackson 5', había
vivido virtualmente
recluido desde que fue exonerado en 2005 de cargos de abuso a menores.
Vida aislada
En los últimos años, la salud de Jackson preocupaba, pero los organizadores de los espectáculos en Londres, AEG Live, dijeron en marzo que el cantante había
pasado un examen médico de cuatro horas y media realizado por doctores independientes.
Jackson ha llevado una
vida virtualmente
aislada desde que fue absuelto de cargos de abuso infantil en un juicio de 2005, pero todavía es el 'rey del pop' para sus seguidores, pese a su comportamiento y apariencia extrañas.
El cantante
vendió alrededor de 750 millones de discos, ganó 13 premios Grammy y está considerado uno de los mayores artistas de la música pop de todos los tiempos.
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