El prometido y esperado regreso musical de la diva del pop, Britney Spears , se vio el pasado sábado empañado por un individuo, quien interrumpió el concierto subiendo al escenario en donde la cantante actuaba, en el Mohegan Sun Arena, Connecticut.

El joven fan, de 20 años, y de nombre Kyle King, confesó a la policía estar "bebido" cuando subió al escenario, burlando la seguridad y provocando un tremendo susto a Britney, que se hallaba cantando su "hit" Womanizer, de su último álbum, Circus, cuenta el portal TMZ .

Aunque King logró llegar bastante cerca de la cantante y sus bailarines, los agentes de seguridad pudieron detenerle antes de que la tocara, y fue posteriormente arrestado, aunque al parecer mostró resistencia.

King fue posteriormente liberado tras pagar una fianza de 250 dólares (unos 186 euros), y tiene pendiente una vista en el juzgado para el próximo 18 de junio.

El propio King ha colgado un vídeo en youtube , hoy eliminado, en donde explicaba por qué saltó al escenario, y asegurando que no pretendía hacer ningún daño. Britney aún no ha declarado nada oficialmente acerca del incidente.