Andre Givens ya ha ganado una medalla a la valentía a pesar de que sólo tiene cuatro años. El jefe de la Policía de Tampa, en Florida, se la entregó después de que el pequeño salvara la vida de su madre, Alisia Givens, tras llamar al teléfono de emergencias cuando ésta sufrió un desmayo.

La Policía asegura que Alisia enseñó a su hijo hace unos meses cómo llamar para pedir ayuda y le dijo "si ves que pasa algo que no debería pasar, llama al 911", según publica la prensa norteamericana.

No cabe duda de que el pequeño aprendió bien la lección porque cuando su madre se desmayó en el coche, cerca de la oficina de correos, Andre no dudó en cogerle el teléfono para pedir ayuda.

"Necesito ayuda"

Al joven héroe le preguntaron por la dirección en la que se encontraba, pero él sólo acertaba a pedir "ayuda" una y otra vez. Al otro lado del teléfono, los empleados del 911 intentaban tranquilizarle mientras rastreaban la llamada.

Andre, entre lágrimas, había logrado decir "en el lugar del correo", cuando los responsables de emergencias consiguieron identificar el origen de la llamada.

Los médicos aún no saben qué le ocurrió a Alisia, que ya se encuentra en buen estado de salud.