La situación en el Valencia, a pesar de que el club celebra su 90 aniversario, no es la más adecuada. El último en hablar en este momento de crisis institucional es Rubén Baraja.

En rueda de prensa, el valencianista aseguró que es una "falta de respeto en toda regla" difundir listas de posibles bajas de futbolistas al final de esta temporada porque se trata de actitudes que son "negativas" para el equipo y "no ayudan" a alcanzar los objetivos, aunque personalmente no le "afecta" ni le "preocupa".

Baraja señaló que

"Tenemos once partidos en los que cada uno demostrará su ilusión y compromiso por ayudar a este club. A falta de once jornadas son cosas que no tocan, pero hay que aguantar el tirón", manifestó el jugador, quien opina que "aun queda tiempo" para que esta temporada "no se tire a la basura".

Baraja no quiso valorar las declaraciones de su compañero Joaquín Sánchez, en las que afirma que con la venta de David Villa y David Silva el club solucionaría sus problemas económicos y explicó que, personalmente, se ve con capacidad para "aportar cosas al equipo".

El jugador piensa que "con compromiso y resultados aún se puede hacer algo bueno" esta temporada y resaltó que "lo más importante es olvidarse de todo lo que se comenta alrededor del equipo y centrarse en el trabajo y en los partidos que quedan".