El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón  ha decretado prisión incondicional para los tres detenidos por la trama de corrupción municipal relacionada con el PP.

Se trata de Francisco Correa, responsable de Special Events, empresa que hasta 2004 organizó eventos para el PP; Pablo Crespo, secretario de organización del PP gallego hasta 1999, y Antoine Sánchez, administrador de la constructora Catalunya Nord Record y de Inversiones Kintamani.

La Fiscalía Anticorrupción había pedido prisión incondicional para ellos alegando riesgo de fuga.

Garzón los acusa de los delitos de blanqueo de capitales, tráfico de influencias, defraudación y cohecho, los mismo que atribuye a los otros 34 imputados que figura, por el momento, en esta causa.

Los tres han sido imputados, junto a otras 34 personas, en el marco de la denominada "operación Gürtel", por presunta corrupción.

Otro detenido, pendiente

También había sido conducido a la Audiencia Nacional el último detenido en la operación, Álvaro Pérez Alonso, conocido como El bigotes y responsable de la empresa Orange Market, detenido el lunes en Valencia.

Finalmente, Garzón no le ha interrogado y previsiblemente lo hará este jueves por la tarde.

Libertad para tres imputados

Por la mañana del miércoles, el magistrado dejó en libertad sin ningún tipo de medida cautelar, tras tomarles declaración, a las tres primeras imputadas en relación con la operación. Eran Carmen Rodríguez Quijano, esposa de Correa, Felisa Jordán y Carmen Luis Cerezo. Rodríguez Quijano, por su parte, se desmarcó de la trama alegando que se está separando del empresario.

Por su parte, la Fiscalía Anticorrupción no descarta que el número de imputados en la causa se amplíe "al menos en dos o tres personas".