Los chicos jóvenes son más felices que las chicas porque se ven más guapos. Lo intuíamos, pero ahora, una tesis de la UPV lo ha constatado por primera vez.

Su autora, la psicóloga Arantzazu Rodríguez, ha comprobado que gracias al mejor autoconcepto del físico que tienen ellos, logran un mayor bienestar psicológico. Es la principal conclusión tras un estudio realizado entre 1.959 personas de entre 12 y 23 años de Euskadi, Burgos y La Rioja.

Las consecuencias de esta situación van más allá de un mero estado de ánimo. La autora recuerda que cuando un joven tiene baja autoestima soporta más riesgo de sufrir depresiones, ansiedad o trastornos en su alimentación, tales como anorexia y bulimia.

A mayor autoconcepto mayor felicidad. Razón suficiente para trabajar el tema. Y mejorar la autoestima no requiere sesudas sesiones de psicólogo.

Por ejemplo, Arantzazu Rodríguez señala que la práctica del deporte mejora el autoconcepto de los jóvenes. Mejora el estado de forma del cuerpo, sí, pero también tiene efectos beneficiosos en el estado anímico de cada persona.

Aquí, sólo hay que tener una precaución. En los adolescentes con un autoconcepto muy bajo, el deporte puede convertirse en un fustigación. Sólo en este colectivo el ejercicio físico puede ser contraproducente. Hay que tener precaución.

La edad también es determinante. A partir de los 15 años aumentan las posibilidades de padecer ansiedad. Las depresiones son más proclives entre adolescentes de 12 a 17 años.

La anorexia y la bulimia suelen llegar cuando los chavales superan los 18 años. Y a partir de los 23 años, bajan las posibilidades de caer en estos trastornos.

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