La vivienda de protección oficial no conoce ni de especulaciones en tiempos de bonanza económica ni de desplome en tiempos de crisis. Así lo aseguró ayer, al menos, el consejero de Vivienda, Javier Madrazo, en la presentación de la Estadística de Viviendas Iniciadas en Euskadi en 2008.

En ese año, se inició en nuestra comunidad la construcción de 7.117 nuevos pisos protegidos, el 48% del total (14.717). Lo que supone que casi la mitad de las viviendas que se construyen actualemente en Euskadi son de protección oficial.

Este porcentaje de VPO es el más alto de todo el Estado, donde la media de viviendas protegidas iniciadas en 2008 fue del 10%.

Además, el alquiler social ha adquirido una importante presencia en el parque protegido vasco. De hecho, el 44% de las VPO iniciadas el año pasado se destinaron a la renta social. Un total de 3.116 viviendas. «En el resto de comunidades autónomas, la producción de vivienda destinada al alquiler es testimonial y casi siempre se trata de alquiler con opción a compra, al contrario que en Euskadi», señaló Madrazo.

Así, actualmente, el parque de alquiler protegido alcanza las 17.000 viviendas, muy cerca de las 19.000 establecidas por el Departamento en el Plan Director de Vivienda 2006-2009.

No obstante, la falta de suelo en Euskadi se hace palpable al comparar la producción de viviendas, tanto libres como protegidas, con otras comunidades. En los últimos diez años, aquí se han construido unos 10.000 anuales, lo que supone una tasa de 7 viviendas por cada 1.000 habitantes. En cambio, en otras regiones la tasa llega a las 17 por cada 1.000 habitantes.

Eso sí, el cambio en producción protegida es notable. Del 20% de VPO de finales de los años 80, se ha pasado al 48% actual.

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