Aragón es una de las comunidades autónomas que más obstáculos presentan a la colocación de los jóvenes. El problema del desempleo se ceba especialmente con el sector de población que oscila entre los 16 y los 24 años, que además tienen que lidiar cada vez más con contratos temporales y mal pagados. Sólo el año pasado se duplicó el número de aragoneses de menos de 25 años que no tienen trabajo, según indica la Encuesta de Población Activa y confirman las estimaciones de los sindicatos.

A finales de 2008 había en Aragón casi 15.000 desempleados en esta franja de edad (en busca de empleo, aunque no necesariamente apuntados al Inaem), frente a los cerca de 8.000 que había en 2007. Este incremento, cercano al 100%, es muy superior al registrado en el resto de España, que se sitúa en torno al 60%.

A esta subida se une ahora una nueva tendencia. En la actualidad, el paro afecta más a los hombres jóvenes que a las mujeres. En el cuarto trimestre de 2008 había en Aragón unos 5.600 varones de 20 a 24 años sin empleo, frente a 4.700 féminas. Hace un año, la situación se daba a la inversa (2.200 varones por 3.300 chicas). Este hecho se explica por dos motivos. Por un lado, la creciente inmersión de la mujer en el mundo laboral, y por otro, el tipo de empleos que más se están destruyendo, según explican fuentes sindicales.

En Aragón, además de la construcción, la crisis económica está afectando especialmente al sector servicios, que cuenta con una gran carga de trabajadoras. En diciembre se realizaron en toda la comunidad 18.688 contratos en este sector, frente a los 26. 453 que se llevaron a término en enero de 2008.

El desempleo no es, sin embargo, un problema ceñido únicamente a los jóvenes. El año pasado terminó con más de 63.000 desempleados en la comunidad aragonesa.

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