La figura de Aubrey de Grey se debate entre su papel del gurú de la lucha contra el envejecimiento y su imagen de científico excentrico. Esta semana ha recorrido diferentes ciudades españolas, invitado por la Obra Social la Caixa para dar una serie de conferencias: Vivir 1.000 años.

De Grey se tituló como ingeniero informático en Cambridge pero pronto cambió su especialidad y ahora se le denomina biogerontólogo. Es presidente y responsable científico de la Methuselah Foundation (Fundación Matusalén), una fundación que lucha contra el envejecimiento financiando proyectos científicos y que, por ejemplo, creó en 2005 un premio para aquellos investigadores que lograran alargar dramáticamente la vida de los ratones.

Su idea es clara: si el envejecimiento es un proceso degenerativo causado por diversos daños celulares y moleculares que se acumulan, estos efectos se podrían reparar con medicina regenerativa.

Con todo esto, De Grey cree que tendríamos un 50% de posibilidades, si se invierte y se apoya la investigación en este campo se podría aumentar la esperanza de vida en 30 años, según declaró al diario El País.

Su visión del futuro es clara: "podremos vivir 1.000 años en una especie de eterna juventud. Podremos permanecer en el estado físico de los 25 o 30 años tanto tiempo como vivamos", afirmó según El Periódico de Catalunya, que también matiza que habrá daños que no se podrán evitar. Según De Grey el envejecimiento no tiene función en la evolución, "no es necesario", concluye.