Se trata de los directores de las cárceles de Valdemoro (Madrid), Jaén y Puerto II (Cádiz), Jesús Eladio del Rey Reguillo, Manuel Martínez Cano y Antonio Diego Martín, respectivamente, así como del subdirector de la prisión de Málaga, Francisco Sanz, y del ex director del centro penitenciario de Algeciras Miguel Ángel Rodríguez.

Pedraz comunicará además a De Juana, ex integrante del "comando Madrid" de ETA, su procesamiento por los delitos de pertenencia a organización terrorista y amenazas terroristas en relación con dos cartas que publicó en "Gara" el pasado diciembre.

En una de estas misivas, titulada "Gallizo", en referencia a la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, De Juana se refiere a ésta y a los responsables de seis cárceles, aunque sólo menciona el nombre de los cinco que comparecerán ante Pedraz, "a los que atribuye todo tipo de torturas y vejaciones".

Pedraz procesó a De Juana por estos hechos a principios de este mes después de que, en julio, la sección primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le ordenara procesar al etarra al anular su decisión de concluir el sumario abierto en relación con las citadas cartas sin dictar su procesamiento.

Antes de que Pedraz se hiciera cargo de esta causa al llegar al juzgado central de instrucción número uno de la Audiencia Nacional, su anterior titular, el juez Fernando Grande-Marlaska, ordenó el 10 de enero, a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión del etarra por los citados delitos en relación con las dos cartas publicadas en "Gara".

Sin embargo, Pedraz, al contrario que su compañero, no apreció indicios de delito durante la instrucción de la causa y resolvió concluir el sumario sin procesar a De Juana, revocando así la medida de prisión anteriormente acordada para él.

De Juana se queda en la cárcel

Tras ser recurrida esta resolución, la Sala de lo Penal anuló la decisión del juez y le instó a adoptar las medidas que ha acordado ahora para el etarra, además de decretar su ingreso en prisión provisional por esta causa.

Esta decisión de la Sala evitó que De Juana, que fue miembro del "comando Madrid" de ETA en los años 80, fuera excarcelado el pasado 3 de agosto, fecha en la que hubiera liquidado definitivamente las penas -que sumaban casi 3.000 años de prisión- a las que fue condenado en el pasado por su participación en distintos atentados.

A la vista del contenido de las cartas, tituladas "El escudo" y "Gallizo", la Sala estimó que en ellas el etarra podía estar "tratando de fijar objetivos para las acciones de ETA" y añadía que la publicación de la carta en un periódico "sirve, además de para hacer llegar estos datos a la dirección de la banda, para amedrentar y atemorizar a estas personas y a todo el colectivo que representan".