Soria podría ganar un récord Guinnes gracias a la elaboración del
bocadillo más grande del mundo que tuvo lugar ayer en la plaza de Mariano Granados.
Más de 50 metros de bocadillo de chorizo, queso y mortadela que fueron consumidos por los sorianos, impacientes por el reparto del mismo, en apenas unos minutos, tal y como recoge
Quiero decirle a mis nietos que he comido parte del bocadillo más largo del mundo
La elaboración llevó un poco más de tiempo. "Estaba previsto que se empezase a hacer la masa del pan en torno a las 09.30 horas, pero, como ha estado lloviendo, hemos tenido que posponerlo hasta casi las 13.00 horas", comentaba el organizador del evento, Ángel Barrabés.
Seis horas más tarde, Soria batía el récord del bocadillo más largo, que anteriormente estaba en 46 metros. Cinco metros de más que podrían hacer que la capital entrase a formar parte de las ciudades que entran en el libro Guinnes de los récords. "Todo depende del Ayuntamiento, de si a partir del martes tramitan todo el papeleo necesario para que quede constancia de que hemos batido un récord", explicaba el restaurador José Luis Jiménez Gari, quien fue el encargado de dar fe de la medida del bocadillo.
Degustación
Desde las 17.00 horas cientos de sorianos se agolpaban en las vallas de protección ubicadas alrededor del horno encargado de dejar en su punto el pan. Se mostraban impacientes por degustar un producto de récord.
"Yo quiero probarlo, aunque sólo sea un poquito. Quiero decirle a mis nietos que he comido parte del bocadillo más largo del mundo", explicaba una señora mientras esperaba su turno para recibir parte de este bocadillo gigante.
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