A pesar de que la cifra de delincuentes menores de edad ha bajado un 10,5% en el último año (de 1.028 a 920 internados en centros), cada vez son más las mujeres que ingresan por cometer un delito, según el balance de la Agencia del Menor Infractor.

El balance indica que 129 chicas delincuentes han ingresado en un centro de menores entre septiembre de 2007 y agosto de 2008, lo que supone un aumento del 24% respecto al mismo periodo del año anterior, cuando las infractoras fueron 104 chicas.

Este aumento se debe a que "grupos organizados las utilizan para robar", explicó ayer la directora gerente de la Agencia para la Reeducación y la Reinserción del Menor Infractor, Carmen Balfagón, quien añadió que "hoy [por ayer] mismo he tenido que sacar a una joven la mano de mi bolso". La mayoría (57%) son inmigrantes, "muchas, gitanas rumanas" que viven "en situaciones de marginalidad". De las 129 chicas internas, el 24,8% (32), están embarazadas o tienen hijos menores de 3 años.

Varón, español y ladrón

Aun así, las chicas siguen siendo minoría. De los 920 jóvenes internos, las mujeres sólo suponen el 14,02% del total, cuatro puntos más que hace un año. El perfil tipo de los menores delincuentes internados en el último año es el de un varón de 17 años (35,5%), español (42,39%) y que ha cometido un robo con violencia (52,82%).

En su mayoría, se trata de jóvenes de familias con riesgo de exclusión social con "un gran porcentaje de absentismo escolar, que han crecido en un ambiente violento, con antecedentes penales en sus familias", asegura Balfagón.

El dato positivo del balance es que el número de menores reincidentes ingresados, en alguno de los 13 centros de la región, ha bajado un 42%, pasando de 174 jóvenes hace un año a los 101 actuales.

Este descenso se debe, según Balfagón, a la creación de centros especializados en los que se agrupa a los menores por el tipo de delito (maltrato familiar y sexual) o las circunstancias personales (menores de 15; chicas embarazadas o drogadictos). La bajada más espectacular del índice de reincidencia es el de los adolescentes ingresados por pegar a sus padres. De los 111 internados por este motivo, se ha pasado del 30% del año pasado al 1% de ahora.