La actriz francesa Dominique Blanc ha sido galardonada con la Copa Volpi a la mejor actriz de la 65 edición de la Mostra de Venecia por su papel en la película L'Autre de Patrick Mario Bernard y Pierre Trividic.

El jurado, presidido por el director de cine alemán Wim Wenders, ha reconocido así el trabajo de la actriz francesa que interpreta una mujer torturada con un desdoblamiento de personalidad.

La actriz se declaró "feliz" al recoger el premio y agradeció al Jurado y al Festival haber seleccionado esta película que calificó de valiosa y poco común.

Blanc sostiene prácticamente el guión de toda la película, en la que le acompaña el actor Cyril Gueï, pero ya en un muy segundo plano. La actriz francesa era la favorita para este premio y al recogerlo habló en inglés, francés e italiano, para agradecerlo.

'The wrestler', mejor película

La película The wrestler, del director neoyorquino Darren Aronofsvky e interpretada por Mickey Rourke, obtuvo el León de Oro a la mejor película de la 65 edición de la Mostra de Venecia.

El jurado, presidido por el director alemán Wim Wenders y en el que se encontraba la cineasta argentina Lucrecia Martel, consideró esta película, que trata sobre un luchador de lucha libre acabado al final de su carrera, como la mejor de las veintiuna que han competido por ese galardón.

Silvio Orlando, mejor actor

El actor italiano Silvio Orlando ha obtenido la Copa Volpi a la mejor interpretación masculina por su actuación en Il Papà di Giovanna, de Pupi Avati, en la que interpreta al personaje que da nombre a la película. El jurado ha reconocido así el trabajo de este actor napolitano que ha participado en títulos notables del último cine italiano, como Il Caimano (2006) y La habitación del hijo (2001).

Orlando, que recibió el premio de manos de Valeria Golino, se declaró muy afortunado por haber trabajado en la película "con un grupo de personas maravillosas" y agradeció a Avati "el regalo maravilloso" que ha supuesto para él su personaje.

Il Papà di Gïovanna cuenta la historia de una joven adolescente con un desequilibrio mental que mató a su mejor amiga en Bolonia en 1938. Producida por Mediaset, firma propiedad de Silvio Berlusconi, permite a Avati profundizar en la relación padre e hija, al tiempo que redimir sorprendentemente al fascismo.

"Uno de los más flojos"

Este año el festival ha sido, en opinión de crítica y público, "más flojo" que en anteriores ediciones. De esa apreciación han tenido la culpa dos o tres películas "sin historia", es decir, que no contaban nada, y tres de las cuatro películas italianas, con participación de Mediaset, o sea de Silvio Berlusconi, peaje nacionalista que ha tenido que pagar la Mostra.

Entre las películas sin historia figuran "Gabbla" del franco argelino Tariq Teguia y "Dangkou" (Plastic City) del chino Yu Lik-wai, ambas con un soberbio tratamiento de la imagen, pero más próximas al vídeo arte y a la salas de exposiciones que a las de cine.

Las tres italianas son "Il seme della discordia" de Pappi Corsicato, "Il papa di Giovanna", de Pupi Avati, y "Un giorno perfetto", de Ferzan Öspetec, reproduciendo las tres historias de amor, más o menos trágicas, pero siempre guardando el sentido tradicional de la familia: marido, mujer e hijos, cada uno en su papel bíblico.