La sexagésimo novena edición de la Exposición Internacional de Artes Plásticas se presenta con importantes novedades, algunas de ellas "muy arriesgadas", tal y como las calificó ayer, en rueda de prensa, el alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín. Así lo ha informado en su versión digital el diario La Tribuna de Ciudad Real.

Desaparecerán los premios habituales (Primera Medalla y Pámpana de Oro), así como las aportaciones de otras instituciones (la de la Diputación), que se pasarán al fondo de adquisición de obra, y se instituirá únicamente una Medalla de Oro, una para la modalidad de pintura, y otra para escultura.

También cambiará la dotación de estos premios, que en el caso de la pintura estará instituido por el Ayuntamiento de Valdepeñas y la Consejería de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha; en el caso de la escultura, será sólo el Ayuntamiento el que instituya el premio.

El alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, explicó que, con el objetivo de recuperar el espíritu con el que se creó la exposición, esto es promover el mecenazgo y el descubrimiento de nuevos artistas, la Medalla de Oro de la exposición estará dotada con un máximo de 30.000 euros, pero el ganador sólo percibirá el precio que, al inscribirse, haya dado a su obra.

Precio de las obras

El resto se destinará al fondo de adquisición. El alcalde se mostró convencido de que los pintores se adecuarán a los valores reales de mercado al fijar un precio para sus obras porque, adelantó el primer edil, en el caso de que no resulten premiadas, si se les pone un coste excesivo, perderán la oportunidad de que sean adquiridas por algún mecenas.

En cuanto a la escultura, de lo que se trata es de que esta modalidad recupere presencia en la exposición. Los costosos traslados de las piezas han hecho retroceder la participación de escultores en la Exposición Internacional de Artes Plásticas en los últimos años. A partir de ahora, los artistas podrán presentar sus maquetas, con el material definitivo y con el valor de la misma, o bien apuntando su destino final.

El Ayuntamiento no pondrá cifra económica a esta Medalla de Oro porque el autor percibirá el valor que tenga su escultura, que quedará en poder del Ayuntamiento, tanto si se eleva a monumento como si no.

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