El militar, Alexander Guerrero, al parecer se encontraba realizando un ejercicio militar y accidentalmente se le activó un lanzagranadas, incrustando el artefacto explosivo en su pierna, según informa la emisora local Caracol Radio .
El joven fue trasladado inicialmente al hospital de Cajicá, en el departamento de Cundinamarca, donde fue aislado y examinado con presencia de expertos de la Policía antiexplosivos. Posteriormente le llevaron al Hospital Militar, cuyo jefe del servicio de Urgencias, Ricardo Uribe confirmó que el equipo médico logró extraer la granada en 17 minutos sin causar daños al militar.
"La granada no fracturó el hueso ni ocasionó daños graves en los tejidos del soldado", precisó el médico tras señalar que, al parecer, la granada MGL no explotó porque recorrió una pequeña distancia antes de alojarse en extremidad inferior derecha de Guerrero.
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