El artista zamorano Luis Francisco Prieto Blanco, que firmaba sus obras con el nombre de Luis Quico, falleció el sábado a los 76 años de edad a consecuencia de una larga enfermedad, según ha informado la familia del artista.

Su delicado estado de salud le había impedido acudir a la inauguración de la última exposición que realizó en Zamora, en la sala del edificio municipal de la Alhóndiga, donde el pasado mes de febrero se mostraron 75 obras representativas de su producción artística de la segunda mitad del siglo XX.

Luis Quico fue un artista polifacético que cultivó la pintura, la escultura, el dibujo, el cómic y la caricatura pero que destacó especialmente como artesano de vidrieras.

A lo largo de su vida realizó por encargo vidrieras que dan luz y decoran numerosos templos y edificios civiles de España y Portugal.

La iglesia de Santa Marina de Villarcayo (Burgos) o las del Espíritu Santo, Cristo Rey y San Lorenzo de Zamora son algunos de los templos en los que se pueden ver sus vidrieras.

El oficio de artesano de vidrieras lo continuó la única de sus cuatro hijos que sigue viva, María del Carmen Prieto, que con motivo de la última exposición de su padre había mostrado su agradecimiento por una muestra retrospectiva que recogía parte de la producción artística de su padre a lo largo de medio siglo.

El artista zamorano tenía una gran amistad con el poeta y académico de la Lengua fallecido en 1999 Claudio Rodríguez, quien le había dedicado uno de sus poemas en el que evocaba la amistad de ambos y ensalzaba la obra artística de Luis Quico.

Los restos mortales de Luis Francisco Prieto Blanco recibieron ayer sepultura en el cementerio municipal de San Atilano.

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